Destacaron los porteros Ochoa y Martínez
Polémico penal da victoria al América
Ampliar la imagen Irenio Soares (izquierda) trata de eludir a Ricardo Rojas Foto: Notimex
San Luis Potosi, SLP, 5 de agosto. Sin un futbol brillante y gracias a un penal dudoso, el América inició con un triunfo el torneo Apertura 2006, al imponerse 1-0 al San Luis, en partido ríspido ante lleno en el Alfonso Lastras.
El argentino Matías Vuoso anotó su primer gol con la casaca americanista, al convertir una pena máxima que el árbitro Francisco Caspeta marcó por una supuesta falta de Oscar Mascorro, en la presentación de Luis Fernando Tena en el timón amarillo. Por cierto, ni él ni su hermano y auxiliar Alfredo tuvieron la diadema que la temporada pasada usaron los técnicos de las Aguilas.
La figura fue Guillermo Ochoa, quien realizó acertados lances ante el acoso local, mientras Claudio López y Salvador Cabañas fallaron varias oportunidades para aumentar el marcador.
Los Tuneros empezaron a dominar el duelo, pero Ochoa se mostró acertado desde el inicio, al desviar disparos de Adrián García Arias e Irenio Soares. Después Israel Martínez mandó tiro bombeado que superó a Ochoa, pero Antonio Castro despejó con la cabeza cerca de la línea de gol.
Al 24 fue la jugada polémica. Mascorro cargó sobre Vuoso, quien alcanzó a conectar con la cabeza y el esférico pegó en el brazo izquierdo del central, con lo que Caspeta marcó el penal. Vuoso tiró a la izquierda y engañó a Adrián Martínez, para el único tanto.
El cuadro de Raúl Arias tuvo el control del balón, pero creó peligro hasta el inicio del complemento, en llegada de Irenio, pero Ochoa salió bien.
El paraguayo Nelson Cuevas ingresó al 55, por Vuoso, y le dio algo de salida a su equipo, que se había mostrado muy limitado.
Ochoa realizó otro lance vistoso y efectivo al 59, al detener un cabezazo de Marcelo Guerrero.
Aílton da Silva dejó su lugar a Angel Reyna y los Tuneros siguieron con el esférico, pero las llegadas fueron de los visitantes. En contragolpe, Cabañas desbordó y mandó un centro medido a un solitario Piojo López, quien sin marca estrelló el balón en la salida de Martínez.
El duelo terminó con manotazos entre los jugadores y la expulsión de Gringo Castro.