En los países donde existe esa política tarifaria la oferta cultural es más amplia y mejor
Los buenos editores, en favor del precio único del libro: Herralde
El fundador de Anagrama presentará dos libros de su autoría en el Centro Cultural de España
Ampliar la imagen Jorge Herralde presentará el jueves sus libros Por orden alfabético: escritores, editores, amigos y Para Roberto Bolaño Foto: María Meléndrez Parada
Los buenos editores están y deberían estar en favor del precio único del libro, afirma el fundador del sello Anagrama, Jorge Herralde, quien se encuentra de visita en México para compartir con sus colegas sus ideas respecto a esta iniciativa "fundamental para la salud librera de México".
También presentará sus libros Por orden alfabético: escritores, editores, amigos y Para Roberto Bolaño, ambos a manera de homenaje a los autores que han forjado el prestigio de esa casa editora independiente, la cual ha publicado de 1969 a la fecha más de 2 mil 500 títulos.
En entrevista con La Jornada, Herralde señaló que en el Reino Unido la supresión del precio único del libro "fue un gran descalabro. El que no exista un precio fijo significa, como pasa en México, que desaparezcan las librerías independientes, que no se estimule el nacimiento de nuevas, y favorece la concentración de los grandes grupos, así como el auge del best seller puro y duro, de rotación rápida.
"El precio fijo, aún en estos tiempos amenazados por la superconcentración y la superproducción, es un refugio para los buenos libreros y para los editores que tienen aspiraciones culturales.
"Hay estudios serios y neutrales que indican que, en los países donde no existe o desaparece el precio fijo, el precio global de los libros aumenta más. Al final, en los países donde se ha implementado el precio fijo la oferta cultural es más amplia y mejor. En todo sentido, es superpositivo, excepto, claro, para una visión a corto plazo."
Oficio abstracto
Jorge Herralde señala que para muchas personas el oficio de editor "es bastante abstracto y opaco. Durante años un cuñado me preguntaba, medio en broma: '¿cómo va tu imprenta?' Y es que el editor ni escribe ni imprime.
"El editor crea colecciones, suscita complicidades y va conformando un catálogo que debería ser coherente y exigente. Uno de los símbolos que me gusta mucho y utiliza mucho el editor francés Christian Bourgois es el del barquero, porque el editor va, lleva y está entre la orilla de la literatura a la orilla de la lectura, entre los autores y los lectores. Esta me parece una definición más exacta.
"Una de las cosas más gratificantes de un editor es empezar con un autor desconocido e irlo acompañando a lo largo de su carrera, ver cómo va creciendo como escritor, cómo van creciendo sus lectores, cómo van creciendo sus recompensas y su estatura intelectual.
"Esto me ha pasado, por ejemplo, con Ryszard Kapuscinski, que hasta su quinto libro, Ebano, se convirtió en best seller y luego en lo que llamamos un long seller; los lectores, fascinados, fueron a sus libros anteriores, que vamos reditando."
-¿Hay algún autor del que se haya arrepentido de haber invitado a subirse a su barca de editor?
-Sería insensato tener la pretensión de ser infalible. Pero en el catálogo de Anagrama no hay errores clamorosos. Los buenos editores acompañan la carrera de un autor, y todo autor tiene altibajos, libros menores. Un buen editor debe acompañar a su autor inclusive en los tramos menos felices de su trayectoria. Hay libros flojitos, claro, pero cuando sucede pienso que se trata de un libro menor de un gran autor.
Jorge Herralde sostendrá una charla con Pablo Boullosa y presentará sus libros Por orden alfabético... y Para Roberto Bolaño (Editorial Sexto Piso) el jueves 3 de agosto a las 19 horas en el Centro Cultural de España (Guatemala 18, Centro Histórico).