Destacan 5 entidades por la degradación social
Exige el Congreso plan para frenar la violencia
Escalada de asesinatos en el pasado cuatrienio, afirman
Debido a que este año han fallecido en el país en forma violenta unas mil personas, de las cuales 800 están relacionadas con los cárteles del narcotráfico, el Congreso de la Unión aprobó un exhorto a las autoridades federales, del Distrito Federal, estatales y municipales, para que de inmediato establezcan un plan de emergencia con medidas enérgicas que garantice la seguridad de los mexicanos.
El exhorto, presentado a iniciativa del grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, incluye un llamado al Sistema Nacional de Seguridad Pública para que, en el marco de la coordinación interinstitucional previsto en la Constitución mexicana y demás leyes, realice acciones que garanticen la justicia y paz en el territorio nacional.
De acuerdo con cifras oficiales, el crimen organizado ha presentado un crecimiento significativo durante los últimos años, lo cual se refleja en la muerte en forma violenta de unas 4.4 personas al día.
Datos proporcionados por la Cámara de Diputados confirman que el aumento de esos decesos se registró en el primer semestre de 2006, a causa de las ejecuciones ligadas con el narcotráfico en entidades como Guerrero, Michoacán, Baja California y otras del norte del país.
Las cifras consignan que los cinco estados de la República Mexicana con el mayor número de hogares que sufrieron algún delito son el Distrito Federal, Baja California, Morelos, estado de México y Chihuahua. En contraparte, las entidades con menor incidencia delictiva son Durango, Zacatecas, Baja California Sur, Colima, Puebla y Tlaxcala.
El valor de la criminalidad en México se sitúa en un rango que va de 10 a 14 puntos porcentuales del producto interno bruto (PIB), por lo que se podría prever que el costo de la violencia para este año en el país rondará entre 72 mil y 100 mil millones de dólares, según datos del Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En un documento del BM se señala que aun cuando la violencia no es un fenómeno nuevo que se presenta en la mayor parte de los países de América Latina, el crimen organizado y la violencia aumentaron notoriamente en los últimos años y son ahora reconocidos como un problema económico y social serio, particularmente en las grandes urbes.