Versión de que el gobierno texano ocultó su actividad porque es de la DEA
Confirmado: era policía el estadunidense asesinado el jueves en Guadalupe, NL
Ampliar la imagen El automóvil Ford Mustang color verde, con placas de Texas, que José Omar Bazuldúa Praga pretendia abordar el jueves, tras salir del domicilio de su novia, en el municipio de Guadalupe, conurbado a Nuevo León. El policía fue interceptado y ejecutado por cuatro pistoleros que iban en una camioneta con placas de Tamaulipas Foto: Alfredo Valadez
Monterrey, NL, 21 de julio. Omar Bazaldúa Sandoval confirmó ayer que su hijo José Omar Bazaldúa Graham, acribillado el jueves por cuatro sicarios en el municipio de Guadalupe, Nuevo León, sí trabajaba como policía en Estados Unidos.
Bazaldúa Sandoval acudió la madrugada de este viernes al anfiteatro del hospital Universitario de Monterrey a reconocer el cadáver de su hijo, de 39 años de edad, y en el acta de defunción que firmó se estipula que la profesión de la víctima era la de "policía".
Jesús Martínez Avila, secretario de Seguridad Pública de Guadalupe, municipio conurbado a Monterrey, indicó la tarde del jueves que Bazaldúa Graham era originario de McAllen, Texas, y de profesión policía.
Más tarde, Marcelo Garza y Garza, director de averiguaciones previas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), aseguró que un reporte oficial de las autoridades de Texas, negaba ese dato.
Sin embargo, hoy trascendió que de acuerdo con fuentes policiacas del estado, el gobierno estadunidense habría negado la actividad de Bazaldúa Graham, debido a que se "trataba de un policía encubierto de la agencia antidrogas de Estados Unidos" (DEA, por sus siglas en inglés).
Según las fuentes que pidieron el anonimato, el presunto informante de la DEA habría sido ejecutado por extorsionar a narcotraficantes mexicanos. Lo anterior no fue confirmado por la PGJE, que este viernes no emitió información actualizada del caso.
La familia de Bazaldúa Graham recibió en las primeras horas del día los restos del ex policía, los cuales -se informó- serían trasladados en el transcurso de este mismo viernes a la ciudad de Mission, Texas, donde se realizará el sepelio.
Por otra parte, la Policía Estatal instaló un retén móvil con policías del Grupo Especial Antisecuestro SWAT de la Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León y perros adiestrados en la detección de armas y drogas, con el propósito de revisar al azar algunos vehículos y sus ocupantes.
El operativo se aplicará temporalmente en diversos cruceros y avenidas de entrada y salida a la zona metropolitana de la ciudad de Monterrey, como una medida preventiva contra la ola de violencia que ha azotado en meses recientes esta zona del país.