"A nadie lastima el ánimo de saber efectivamente quién ganó los comicios", plantea
Carlos Monsiváis pide al TEPJF razonar cuidadosamente su fallo
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El escritor Carlos Monsiváis en el Hemiciclo a Juárez, en el acto del 134 aniversario luctuoso del Benemérito de las Américas, que se efectuó ayer
Foto: Guillermo Sologuren
En la conmoemoración solemne del 134 aniversario luctuoso del Benemérito de las Américas, el escritor Carlos Monsiváis afirmó que la democracia es un valor juarista y metajuarista, y por eso apoya al movimiento social que, con la consigna voto por voto, demanda la revisión exhaustiva de los cómputos de los pasados comicios, "porque creo que a nadie lastima ni perjudica ese ánimo tranquilo de saber efectivamente quién ganó" las pasadas elecciones presidenciales.
Ante representantes de logias masónicas del país que se dieron cita en el Hemiciclo a Juárez como parte de los festejos del bicentenario del prócer, el cronista afirmó que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tiene que razonar profusa y ampliamente su decisión de aceptar o no la apertura de las urnas impugnadas.
En el encuentro, el legislador federal Manuel Jiménez Guzmán destacó que el proceso electoral no ha terminado, porque falta que el TEPJF declare presidente electo para que haya legalidad y legitimidad en la gobernabilidad.
Monsiváis apuntó que Benito Juárez se mantiene presente en la vida nacional por "la presencia de errores, obstinaciones y apegos al poder, que siguen siendo obstinaciones profusamente contemporáneas", y porque su mensaje y obra corresponden al ámbito convulso en el cual surge el proceso secularizador.
A su grandeza, dijo en su participación, inclusive se le han rendido la Iglesia y la derecha política, así como el presidente Vicente Fox, quien ha empleado el apotegma "El respeto al derecho ajeno es la paz".
"La derecha política le ha reconocido virtudes. Ha sido una virtud un tanto penosa, porque no la han razonado, pero una rendición al fin y al cabo", agregó.
Por su parte, el legislador priísta recordó que en su momento Adolfo Hitler, el líder nacionalsocialista, hablaba de la legalidad conmoviendo a su pueblo, pero "no todo lo legal es legítimo, y lo que ayer era estabilidad hoy es gobernabilidad democrática. Por eso, para bien de la República, los votos deben contarse, debe haber un proceso transparente, pulcro y a la altura del siglo XXI". Señaló que para el país Juárez está en la separación irrenunciable del Estado y la Iglesia, y en la no intervención del clero en los asuntos políticos del país. Por eso, agregó, hay quienes lo atacan, porque son sectarios, apáticos y apátridas: "Juárez es la historia y sus enemigos la contrahistoria".