El silbante Armado Archundia se salvó de las críticas
La actuación de los árbitros, una verdadera catástrofe: Bernard Saules
Berlín, 27 de junio. Los árbitros cayeron en desgracia inclusive ante El Kaiser Franz Beckenbauer. "No logran controlar la situación al ciento por ciento", comentó el jefe del comité organizador del Mundial.
Guenter Netzer, experto en futbol de la televisora alemana ADR, consideró que los silbantes "están teniendo demasiada influencia en los partidos. Sacan tarjeta amarilla muy pronto, a lo que sigue la otra y luego la expulsión. Eso falsea el desenlace de los partidos y no contribuirá a mantener la alegría en el futbol".
Bernard Saules, presidente de la Unión Nacional de Arbitros de Francia, consideró que el desempeño de los colegiados en Alemania ha sido "una verdadera catástrofe desde el principio", y señaló que la repetición en video podría ayudar a mejores decisiones.
"Debemos frenar la hipocresía, los penales absurdos y las tarjetas mostradas por nada", añadió.
Luego de las tres amarillas que mostró el inglés Graham Poll y el récord de tarjetas del ruso Valentin Ivanov, este lunes fue el español Luis Medina quien generó polémica en el Italia-Australia (1-0) al expulsar al italiano Marco Materazzi y pitar en el último segundo un penal a favor de los azzurri.
En 54 partidos jugados hasta el lunes se produjeron 24 expulsiones, un récord en mundiales. El anterior es de 22 rojas en Francia 98, pero después de 64 encuentros. La cifra de amonestaciones de 263 se acerca a la mayor marca, de 272 mostradas en Corea-Japón 2002.
Pese a las críticas, Beckenbauer elogió el lunes efusivamente al mexicano Armando Archundia, que dirigió el empate a cero que terminó con victoria por penales de Ucrania sobre Suiza.
"Fue excelente, dejó fluir el juego. Tuvo un gran rendimiento", sostuvo sobre el nazareno.