La empresa concentra la tercera parte del mercado nacional de tortilla

Maseca cuadruplicará ventas en EU

El país no puede renunciar a la biotecnología, advierte Alfonso Cebreros

MATILDE PEREZ

La tercera parte del consumo nacional de tortilla -104 kilos per cápita anuales- es concentrado por Maseca, la cual invierte 200 millones de dólares anuales en el mundo para mejorar la calidad de su oferta y ampliar las plantas procesadoras, informó el director de esa empresa, Alfonso Cebreros.

Este año, Maseca prevé invertir entre 40 a 45 millones de dólares en la ampliación de las plantas ubicadas en Mérida y Mexicali y en corto plazo hacerlo en Chiapas. En septiembre abrirá la planta que construyó en China; en breve construirá otras en Japón y Rusia y la expectativa es que en tres años esté presente en Africa. En el país, la harina ya se ha convertido en un elemento complementario en la producción de tortilla, ya que la masa de nixtamal se mejora con la mezcla de harina y por ello, Maseca coloca en el mercado nacional millón y medio de toneladas anuales y en el extranjero dos millones de toneladas.

Líder en el mercado de Estados Unidos, la industria tiene amplias posibilidades de expandirse hasta cuadruplicarse, mientras que Centroamérica y México son ya mercados "maduros" y no hay probabilidad de un fuerte crecimiento. La apuesta está en Estados Unidos y en Asia, asentó.

En el marco del Encuentro Ministerial de Comercio y Agronegocios, que se realizó en Guatemala, el director de Maseca afirmó que "ninguna empresa ha probado tantas variedades de maíz para mejorar la calidad de su oferta; tenemos experimentos con más de mil variedades del grano, pero ninguna es transgénica; todos son maíces criollos".

Ante la perspectiva de mayor demanda de maíz amarillo en varios países del mundo por la elaboración de energéticos alternativos -como el etanol- y de una posible repercusión en los precios del grano, el director de Maseca aclaró que por el momento eso no influirá en el precio de la harina ya que la demanda para ese tipo de combustible es de maíz amarillo. "Esperamos que durante los próximos dos años haya un buen precio, incluso alto, para el maíz, pero después habrá una normalización del mercado".

Insistió en que no habrá incrementos en los precios de la harina ni en la tortilla, aunque sí hay que pensar en que ya no se puede seguir llevando maíz de Sinaloa hasta Mérida o a Mexicali debido a los costos de los fletes. "Sale más barato comprarlo en Estados Unidos y llevarlo vía marítima, por ejemplo de Nueva Orleáns, ya que en el país el flete cuesta 700 pesos por tonelada más los 350 pesos que por subsidio entrega el gobierno. Ese dinero sería mejor invertirlo en mejorar la productividad en otra región", consideró.

Advirtió que el país no puede renunciar a la biotecnología, "es una revolución científica"; hay que tomar previsiones y revisar caso por caso, con cuidado, pero no hay que dejar de mirar que China y la India están aplicando biotecnología con pequeños y medianos agricultores, lo que hace a un lado el señalamiento de que ese proceso es sólo para productores de altos ingresos.