Enfrentamiento en el Consejo de Derechos Humanos
Cuba exige a Europa dejar de ser cómplice de Estados Unidos
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Felipe Pérez Roque, canciller de Cuba, durante su intervención de ayer en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU
Foto: Ap
Ginebra, 20 de junio. Cuba "no se hace ilusiones" de que Estados Unidos y sus aliados revolucionarán, en el Consejo de Derechos Humanos, las concepciones y métodos que lastraron a la defenestrada Comisión, pero "les concederá el beneficio de la duda", afirmó hoy el canciller de Cuba, Felipe Pérez Roque.
En este nuevo foro exigió a Europa que "rectifique" su postura de "complicidad" con Estados Unidos, evidente al no oponerse a los vuelos secretos de la CIA, a la existencia de cárceles clandestinas, al secuestro de personas en territorio europeo y a la falta de respeto a otras religiones con las caricaturas de Mahoma.
"Enjuiciamos con severidad la conducta de la Unión Europea (UE). La razón tiene que ver con temas de alcance universal, pues se opuso el año pasado a que la Comisión investigue sobre las violaciones que ocurren en la base naval de Guantánamo, actitud de doble rasero e hipócrita que no expresa la opinión de sus pueblos", dijo.
Pérez Roque describió lo que llamó "groseras y desesperadas maniobras y presiones de Estados Unidos para impedir su elección al Consejo", al citar el acuerdo secreto obtenido en Bruselas para que la UE hiciera campaña contra La Habana. No obstante, Cuba fue elegida por abrumadora mayoría.
"Quien ocupa el escaño es el gobierno de Estados Unidos, no su pueblo", por lo que Cuba será "vocero también de los derechos del pueblo norteamericano, particularmente de sus sectores más discriminados", aseveró Pérez Roque.
La representante estadunidense, Velia de Pirro, acusó a Cuba de "ataques gratuitos e infundados" contra su país, y aseveró que "los norteamericanos no necesitan de nadie, particularmente de oficiales de un gobierno autocrático, para hablar por ellos".
"No son ataques, son verdades", terció Cuba, como la tortura en Guantánamo o el desprecio a su propio pueblo víctima del ciclón Katrina, en lo que fue la primera confrontación politizada del Consejo en el uso del derecho de réplica.
En tanto, la Cámara de Representantes rechazó un proyecto de ley que obligaría a cabilderos y diplomáticos de Cuba y de otros Estados, considerados por Washington auspiciantes del "terrorismo", a revelar al fiscal general su contactos legislativos, informó Afp.