Armó trifulca porque quería estar junto al aspirante presidencial; periodistas golpeados

Edil de Palenque agrede a escolta del perredista

ANDREA BECERRIL ENVIADA

Palenque, Chis., 9 de junio. El alcade perredista de Palenque, Alfredo Salgado Correa, puso ayer en riesgo la integridad física de López Obrador, al llevar al mitin del perredista a policías armados, que se confrontaron con el equipo de seguridad del candidato presidencial, secuestraron por más de una hora al teniente coronel Silvio Hernández Soto, escolta del tabasqueño, y golpearon a reporteros y camarógrafos.

La actitud del edil de pasado priísta provocó además que habitantes de Palenque se angustiaran al creer que alguien había agredido a López Obrador. Hubo reclamos de muchos perredistas que no entendían cómo el presidente municipal armara tal escándalo en presencia del candidato presidencial de su partido, quien fue puesto a salvo por el equipo del general Audomaro Martínez Zapata.

El edil llegó tarde al mitin, acompañado de una escolta 10 policías municipales vestidos de civil, pero armados, y se quedó junto al templete donde López Obrador comenzaba a hablar ante miles de chiapanecos.

Salgado Correa trataba a toda costa de colarse al templete, pese a que el personal de seguridad le explicaba que una vez que López Obrador sube ya nadie lo puede hacer. Además, le hicieron notar que era un riesgo que estuvieran allí los policías armados.

Sin embargo, éstos no se retiraron y el alcalde se ponía cada vez más agresivo, frente al teniente coronel Hernández Soto -segundo del general Martínez Zapata- quien intentaba convencerlo de que retirara a los policías del mitin.

Los periodistas se acercaron y Salgado Correa ordenó al subdirector de seguridad pública, Julio César Martínez, que retirara a los comunicadores y les tapara las cámaras. "¿Quién es usted, por qué nos agrede?", le preguntó un reportero, y Salgado Correa le gritó: "Yo soy el dueño de Palenque".

El senador con licencia y candidato perredista a gobernador de Tabasco, César Raúl Ojeda Zubieta, le dijo: "No seas cabrón, calma a tu gente, que anda muy caliente". "¡No! hasta que ese me pida disculpas", respondió, señalando hacia el general Audomaro Martínez.

Se fue luego sobre el teniente coronel Hernández Soto: "En cuanto acabe el mitin, te voy a detener y yo personalmente te voy a romper la madre", le dijo, y la respuesta de éste fue: "Hágale como quiera, la zona militar está aquí muy cerca".

"¡Pues aquí nadie va a venir a hacer mamadas!", insistió.

Por celular, Salgado Correa dio luego una orden: "llamen a todos, ahora sí se los va a llevar la verga", y al poco rato llegaron unos 70 policías, quienes apenas terminó su discurso López Obrador apresaron al teniente coronal Hernández Soto, lo golpearon y casi a rastras lo llevaron a la presidencia municipal, localizada a cuadra y media de donde se llevó a cabo el acto del candidato presidencial.

Reporteros y camarógrafos que seguían la trifulca fueron golpeados y jaloneados. Luis Manuel Barajas, camarógrafo de Detrás de la Noticia, fue inmovilizado por un policía que le puso un brazo en el cuello; Francisco Rubio, reportero de Radio 13, fue pateado, hasta que lo rescataron sus compañeros de otros medios, porque ya llegaban más elementos policiacos macana en mano.

López Obrador fue sacado por la parte trasera del templete, pero muchos de sus partidarios, al ver el tumulto, pensaron que algo le había sucedido y se arremolinaron frente a la presidencia muncipal, expectantes.

Más de una hora estuvo secuestrado el teniente coronel Hernández Soto, hasta que el general Martínez Zapata logró su liberación. Cuando al fin Salgado Correa dio la cara a la prensa -escoltado por policías-, trató de disculparse , dijo que había sido "un malentendido", porque su gente vio que había "un tipo raro", negó que hubiera ordenado la agresión a la prensa, pero recalcó: "aquí se cumple la ley".