Requieren atención urgente las demandas rezagadas de la agenda social, consideran
Riesgo de que crezca el divorcio entre la clase política y la sociedad: académicos
Un mayor abstencionismo limitaría la consolidación de la democracia en México, plantean
De continuar una contienda electoral en la que se privilegian la descalificación, los escándalos y el "espectáculo político" frente a demandas urgentes de la agenda social, el "divorcio" entre la clase política y la sociedad será más profundo y elevará el riesgo de generar un mayor abstencionismo, que podría "limitar la consolidación de la democracia en México", aseguraron politólogos e investigadores.
Al participar en el coloquio nacional Las instituciones electorales ante la sociedad mexicana, convocado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y diversas universidades públicas, especialistas en ciencia política del Centro de Investigación y Docencias Económicas y de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) señalaron que ante el creciente déficit de confianza en los partidos políticos, la tendencia hacia una participación creciente del electorado no es "alentadora".
Roberto Gutiérrez López, director de la División de Ciencias Sociales y Humanidades de la UAM-Azcapotzalco, aseguró que a menos de un mes de las elecciones federales "ni los partidos ni los candidatos han logrado socializar entre la población cuáles son los planteamientos de fondo de sus proyectos y qué podemos esperar de cada una de estas opciones, lo que podría motivar a los ciudadanos a no ir a las urnas".
A mayor abstencionismo, alertó, menores posibilidades de una vida democrática, pues no sólo significa que la ciudadanía no acudió a votar, sino que difícilmente se va a involucrar en convocatorias en las que participen instituciones del Estado que requieren la participación de los ciudadanos para ser exitosas, pues de lo contrario se quedarán "sólo en buenas intenciones".
Destacó que si bien los debates son una oportunidad que "no podemos perder" para que los candidatos den a conocer sus propuestas, en realidad su formato no está hecho para ganar votantes indecisos, "sino para convencerlos de no votar".
Al ser tan débiles los vínculos entre ciudadanos y candidatos, afirmó, es difícil que un elector le dé su apoyo, pero cuando finalmente tiene cierta claridad con respecto a quién va apoyar y por qué, "de pronto aparece una nueva descalificación, el amago de un nuevo video, un atentado o la falta de una declaración de impuestos, que parece confirmarle al ciudadano que en realidad no vale la pena votar, porque al final todos son lo mismo y tarde o temprano se les descubrirán sus miserias".
Al respecto, Esperanza Palma, especialista en análisis político de la UAM-Azcapotzalco, afirmó que si bien la preferencia de la ciudadanía por un sistema democrático no ha variado de forma relevante desde la consolidación de la transición en el año 2000, en contraste los partidos políticos continúan a la baja en la confianza de la ciudadanía, incluso, por debajo de los cuerpos policiacos.
Sin embargo, destacó que pese a esta "crisis" de credibilidad, los partidos han influido en la visión que los ciudadanos tienen de la democracia y del sistema político, "como elementos fundamentales, que pueden ser perfectibles, pero que son necesarios para garantizar un sistema democrático, frente a otras opciones totalitarias".
Simulacro electoral en la UAM
Por su parte, estudiantes y académicos de la UAM-Azcapotzalco participarán este miércoles en un simulacro electoral con el que se busca conocer las tendencias "reales" en torno de las preferencias políticas de la comunidad universitaria y frenar la "guerra de encuestas y descalificaciones en que incurren la mayoría de los candidatos a puestos de elección popular".
Pedro Jaimes, profesor-investigador de la UAM-Azcapotzalco y coordinador del ejercicio, aseguró que poco más de 15 mil universitarios, trabajadores administrativos y profesores de este plantel podrán participar en el simulacro de elección de presidente de la República y jefe del Gobierno del Distrito Federal, para lo cual se contará con una copia, en formato reducido, de la boleta que se usará en las elecciones federales de este 2 de julio.
Las 18 casillas y 36 urnas que serán instaladas en la explanada central de la unidad académica abrirán de 9 a 18 horas para recibir la votación, que será libre, universal y secreta, además de que se llevará a cabo una encuesta de salida para conocer las tendencias y realizar un cuadro comparativo con los resultados finales.