Buscan en el Coatán fierro viejo, arena, piedras y leña
Damnificados de Tapachula viven de pepenar escombros
Ampliar la imagen Uno de los habitantes de Huixtla, Chiapas, cocina en un fogón improvisado Foto: Víctor Camacho
Tapachula, Chis., 4 de junio. Los estragos que dejó el ciclón Stan en octubre de 2005 dejaron en crisis a miles de familias, que ante la falta de empleos han vuelto a las zonas de riesgo para recolectar fierros viejos, material pétreo o madera de árboles arrancados por la corriente.
Ejemplos de esta forma de supervivencia hay miles a lo largo del río Coatán, torrente que debido a las lluvias que trajo Stan arrasó con miles de viviendas, vehículos y cuanto halló a su paso. Hoy jefes de familia, madres e hijos trabajan en las márgenes para sacar algún dinero de los despojos que dejó la destrucción.
Maritza Mendoza recolecta desde hace casi cinco meses fierros viejos, varillas de lo que alguna vez fueron casas arrasadas y que hoy son escombros dispersos a lo largo del Coatán.
Aunque Maritza gana apenas 1.20 pesos por kilogramo de fierro, esto no la desanima y dice que este dinero la ayuda a dar alimentación y vestido a su familia.
También hay decenas de recolectores de piedras y arena. Por cada camión de cuatro metros cúbicos obtienen 150 pesos. Emiliano García relata que ésta ha sido su forma de sustento desde hace algún tiempo y cada día hace entre cuatro y cinco viajes.
La familia de Felipe Gómez se gana el sustento y de paso limpia las zonas afectadas. Con una motosierra cortan madera seca de árboles que el Coatán arrastró durante el desastre y la venden como leña, principalmente a panaderías tradicionales, pues no hay árboles que puedan utilizarse para carpintería.