Presentan la obra de la escritora francesa en el teatro Juan Ruiz de Alarcón
Electra, de Yourcenar, plantea que detrás de la justicia está la venganza
El texto es filosófico, rompe la estructura de la tragedia griega: Garcini
Ampliar la imagen Escena de Electra Foto: Yazmín Ortega Cortés
Adentro del Teatro Juan Ruiz de Alarcón, en el escenario, ha sido construido un teatro griego, con columnas, graderío circular y, dentro de éste, otro escenario con piso de arena, también circular. A un costado, ocultando el área de las butacas, que ahora no son ocupadas, se colocó una pantalla gigante que se llena con tomas de líquido rojo, como la sangre.
Ahí ha comenzado temporada nada menos que Electra o la caída de las máscaras, obra de Marguerite Yourcenar basada en el clásico de Sófocles, dirigida por Salvador Garcini y que explora el ejercicio de la justicia como un acto de venganza.
En la historia, Electra (Nailea Norvind) y su hermano Orestes (Fabián Storniolo), con ayuda de Pílades (Rodrigo Vázquez, protagonista de Peer Gynt) y de Teodoro (Esteban Soberanes) planean asesinar a su madre, Clitemnestra (Margarita Sanz) y a su amante Egisto (Rafael Sánchez Navarro), como venganza porque ambos mataron a su padre.
Destaca la experiencia y presencia en el escenario de Sanz y Sánchez Navarro, aunque Norvind saca adelante el difícil papel de la protagonista en una obra de unas dos horas y media de duración y en la que nunca sale de escena, salvo en el intermedio.
Por cierto, durante el estreno hace unos días en el citado teatro del Centro Cultural Universitario, Norvind resbaló de una de las piedras de utilería y cayó sobre unas butacas, pero la función continuó y la actriz sólo tuvo lesiones menores.
Con música en vivo de arpa, flauta transversa, teclado y violoncello, y aciertos varios como el vestuario, salvo el de los guardias, cuya estridencia además lastra un tanto el clímax de emociones encontradas al que se logra llevar al público, Electra o la caída de las máscaras tendrá dos temporadas. La primera se extenderá hasta el 9 de julio, con excepción de los días 2, 3 y 4 de junio, y la segunda del 4 al 19 de agosto. Las funciones son viernes y sábado a las 19 horas, y domingos a las 18.
Filosofía y dramaturgia
"El texto de Yourcenar es filosófico, no dramático", dice Salvador Garcini en entrevista al final del estreno, y agrega:
"Lo que ha mí me interesa de ese texto es la crítica que hace a la estructura dramática de la tragedia griega. Lo que sucede en la tragedia griega es que la justicia está implicada con dios. Los poderes celestiales hacen la justicia."
Pero recuerda que Yourcenar dice que no ante ese planteamiento, pues para ella, sigue el director de teatro, atrás de la máscara de la justicia está el rostro de la venganza.
"Habría que quitarle a la cultura universal la máscara de justicia para ver el rostro de la venganza, y entonces, asimilar nuestra propia responsabilidad en razón al crimen y a la falta de perdón y al rencor y a lo que significa la venganza."
Este "desasimiento" de la estructura dramática del teatro griego es muy profundo, señala. "Pero en nuestro país aún no conocemos tan profundamente esa estructura dramática para entender qué modificó Marguerite Yourcenar.
"Lo que ella hizo fue como romper la estructura de todo el teatro universal y mostrar una nueva, mostrando que el teatro no es una máscara (de llanto y risa), sino un rostro. Y quiso decir que atrás del teatro, y de cada acto de justicia, hay un rostro de venganza y un anhelo de destrucción."
Por eso Garcini concluye que con su versión de Electra, la escritora francesa hace, en última instancia, una crítica al comportamiento de la justicia humana. "Es decir: no hay justicia sin venganza".