La creadora de la colección Ciencia acusa a su directora de despedir a 80% del personal
Fox convirtió al FCE en una empresa comercial, denuncia Carmen Farías
Desde que el presidente Vicente Fox colocó a Consuelo Sáizar al frente del Fondo de Cultura Económica (FCE), en 2003, éste "dejó de ser una institución cultural para convertirse en una empresa comercial", asegura María del Carmen Farías, ex directora de la prestigiosa colección de Ciencia de la editorial del Estado mexicano.
Bajo la gestión de Sáizar, el FCE "ha liquidado o despedido a más de 80 por ciento del personal: es la rotación de empleados y trabajadores más grande en la historia de la institución", subraya quien se considera una víctima más de esa política "arbitraria e injusta", a quien "intrigas y presiones", afirma, obligaron a dejar su cargo en enero de este año.
En su "carta de despedida", que distribuyó profusamente en los más influyentes círculos científicos del país, donde goza de enorme aprecio y respeto, Farías recuerda que ingresó al FCE en 1985, invitada por su director de entonces, el poeta Jaime García Terrés, quien "en forma por demás generosa me encargó iniciar el área de Ciencia y Tecnología que hasta ese momento prácticamente no existía, pues sólo se habían publicado 67 títulos en 51 años, de 1934 a 1985".
Ese mismo año, en colaboración con la SEP y el Conacyt, agrega, "lanzamos la colección La Ciencia desde México (hoy se llama La Ciencia para Todos), que cuenta ya con 211 títulos y es un hito en la historia de las publicaciones de su género, al grado que en diciembre de 2005 había vendido 4 millones 489 mil 13 libros".
Después, con la asesoría de la Secretaría de Salud, María del Carmen Farías creó la colección Biblioteca de la Salud, que cuenta con 38 títulos a la fecha. Tuve, continúa, "el privilegio de colaborar con el maestro Enrique González Pedrero y recibir su apoyo para lanzar en 1989 el concurso de lecto-escritura Para Leer la Ciencia desde México, que actualmente, en su novena edición, se llama La Ciencia para Todos y se celebra en las sedes de la UNAM, aquí en México, con extensiones a Chicago, Estados Unidos, y Gatineau, Canadá".
Gracias a este certamen, explica la editora, "se han acercado a la ciencia, contabilizados hasta la octava edición, 182 mil 733 estudiantes y docentes". En el mismo periodo, abunda, "de la mano con la UNAM se concibió y llevó a la imprenta la colección Ediciones Científicas Universitarias, que ya tiene 37 títulos". Así, resume, durante la dirección del ex presidente Miguel de la Madrid, en el FCE "se consolidaron todas las colecciones de ciencia, tecnología y salud. El concurso se hizo permanente, instituyéndose en forma bienal, y fue adoptado en las repúblicas de Cuba y Colombia, y fue considerado como 'ejemplo de transversalidad' en la Reunión de Ministros de Ciencia, Educación y Cultura del Convenio Andrés Bello, en donde se recomendó que se realizara en los 10 países que integran ese instrumento".
María del Carmen no pasa por alto que en la etapa de De la Madrid surgió, asimismo, la colección conmemorativa del doctor Ignacio Chávez, que consta de ocho volúmenes, y fue coeditada por el FCE, la UNAM, la SSA, el Colegio Nacional y la Fundación Mexicana para la Salud. De manera adicional, prosigue la ex funcionaria, "editamos 17 códices mexicanos y ocho libros de la Colección Puebla, y al mismo tiempo, nos hicimos cargo de la nueva edición y primeras rediciones de la Antología de la Planeación en México, de la que se han publicado 32 obras hasta la presente".
Aumento histórico de títulos sobre ciencia
En suma, dice María del Carmen, "al hacer este recuento encontramos que la sección de obras de Ciencia y Tecnología cobija 217 títulos, la colección Breviarios cuenta con 96 obras de contenido científico, y la colección popular con 38. Cifra que marca un fuerte contrasta con los 67 conseguidos en el período 1934-1985.
Este gran esfuerzo, señala la editora separada del FCE -según se dice- por maquinaciones de Consuelo Sáizar, "sólo pudo realizarse gracias a un equipo de trabajo comprometido con la sociedad y la educación; gracias a una comunidad científica cuyos miembros son ejemplo en el mundo; gracias al Comité General de Obras Científicas y Tecnológicas que nos acompañó casi 21 años; gracias a un amplio grupo de docentes que hicieron suyo el concurso La Ciencia Para Todos; gracias a las instituciones que lo acogieron en su programa de estudios y gracias a todos los coordinadores regionales de diferentes universidades que forman parte de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), que dieron su tiempo y su experiencia para llevar a cabo esta titánica labor".
En el último párrafo de su carta de adiós a la institución, María del Carmen confía que en que hoy, "cuando el FCE se encuentra acechado por los intereses de los grandes consorcios internacionales, la obra editorial en favor de la ciencia sólo podrá perdurar mediante la actitud vigilante de la comunidad científica".
-¿Y qué opina la comunidad científica de su despido?
-Desde que di a conocer mi carta sólo he recibido muestras de respaldo y de simpatía. Creo que la decisión de Consuelo Sáizar no le gustó a mucha gente que conoce la seriedad de mi trabajo.
-¿Cómo la despidieron?
-La actual administración creó la Gerencia de Ciencia, Tecnología y Salud y quiso desaparecer el concurso La Ciencia Para Todos. Como yo me opuse empezó el acoso laboral en mi contra, al punto que me levantaron un acta administrativa para acusarme de supuesto daño patrimonial a la institución. Ante semejante monstruosidad opté por retirarme; a muchos otros compañeros les sucedió lo mismo.
Mañana, en la segunda parte de la entrevista, la ex editora del fondo hablará acerca del número de funcionarios removidos por la actual directora del FCE y hará revelaciones respecto de las anomalías que existen en el interior de ese organismo.