El segundo decidió retirarla de una glorieta; Cavazos Ceballos lo impidió con envío de 100 policías
Escultura de Cuevas confronta al gobernador y al alcalde de Colima
Habrá proceso legal, anuncia el edil panista; la actuación de Morán Sánchez, un capricho, dice el priísta
Ampliar la imagen Trabajadores municipales encabezados por el alcalde capitalino, el panista Leoncio Morán Sánchez, sujetaron con cuerdas la polémica escultura situada en la glorieta de la carretera Colima-Guadalajara. Cuando la grúa se disponía a desmontarla, llegaron policias estatales para impedirlo Foto: Verónica González
Ampliar la imagen Trabajadores municipales encabezados por el alcalde capitalino, el panista Leoncio Morán Sánchez, sujetaron con cuerdas la polémica escultura situada en la glorieta de la carretera Colima-Guadalajara. Cuando la grúa se disponía a desmontarla, llegaron policias estatales para impedirlo Foto: Verónica González
Colima, Col., 27 de mayo. Figura obscena, una escultura del artista José Luis Cuevas, generó un enfrentamiento entre el presidente municipal de la capital de Colima, el panista Leoncio Morán Sánchez, y el gobernador del estado, el priísta Silverio Cavazos Ceballos, debido a que el alcalde intentó quitar la obra de una glorieta para agilizar el tránsito vehicular y Cavazos lo impidió enviándole medio centenar de policías.
Figura Obscena es la tercera obra monumental que Cuevas donó a la ciudad en 2001 pues, aseguró, el entonces gobernador Fernando Moreno Peña le dijo que un año antes, cuando se presentó la exposición Libertad en bronce en los municipios de Colima y Manzanillo, la mayoría de los visitantes opinó que era la mejor de todas, por lo que le pidió agrandarla y exponerla en algún punto de la capital del estado.
La obra fue colocada en la glorieta de la carretera Colima-Guadalajara, lo que generó inconformidad entre los habitantes debido a sus grandes dimensiones y a su peculiar pose -sostenida en tres patas y la cuarta levantada como un animal dispuesto a marcar su territorio-, al grado de que el año pasado la Sociedad Colimense de Estudios Históricos pidió al alcalde Morán Sánchez su reubicación, con el argumento de que la comunidad no se identifica con ella, incluso se siente agredida, pero las quejas fueron ignoradas por las autoridades estatales.
A las 15 horas de este sábado el alcalde acudió a la glorieta con 10 trabajadores municipales con la intención de remover la escultura, pero cuando ya estaba sujeta con cuerdas y una grúa se disponía a quitarla, llegaron policías judiciales y trataron de llevarse presos a los empleados. El alcalde trató de impedirlo y junto con un trabajador cayó al suelo, desde donde gritaba "a él no te lo llevas, primero me llevas a mí".
Posteriormente llegaron el procurador general de Justicia, Arturo Díaz Rivera; el secretario general de Gobierno, Juan José Sevilla Solórzano, y el de Desarrollo Urbano, Eduardo Gutiérrez Navarrete. El primero justificó la detención de tres trabajadores municipales -que de inmediato fueron liberados- con el argumento de que "estaban en flagrancia de delito, porque estaban dañando el patrimonio artístico del gobierno del estado".
Sevilla Solórzano trató de calmar al alcalde y le pidió enviar al gobernador un oficio en el que le pida autorización para remover la escultura, mientras Gutiérrez Navarrete dijo que tanto la glorieta como la obra son propiedad del gobierno estatal.
El presidente municipal dijo que el oficio sería enviado de inmediato "como mera cortesía", pues las vialidades del municipio pertenecen al ayuntamiento de Colima y, por tanto, él tiene la facultad de modificarlas para agilizar el tránsito vehicular. Además, puntualizó, "el proyecto original de la carretera libre Colima-Guadalajara no contempla la construcción de una glorieta, sino una avenida con semáforos en los cuatro puntos cardinales para dar mayor seguridad a los automovilistas y evitar accidentes".
Acompañado de los candidatos del PAN a la presidencia municipal de Colima y a diputado local, Antonio Morales de la Peña y Enrique Michel Ruiz, el alcalde Morán Sánchez instaló una tienda de campaña donde, dijo, esperaría la respuesta del gobierno estatal. Advirtió, sin embargo, que si no le responden, él removerá la escultura para destruir la glorieta y mejorar la vialidad de la zona.
A las 20 horas el mandatario estatal ofreció una conferencia de prensa en la que exhortó al edil a "serenarse" y abstenerse de dañar el patrimonio artístico del gobierno, pues de lo contrario la policía se vería obligada a detener a los trabajadores "en flagrancia de delito", pero no al alcalde, pues tiene fuero, aunque también estaría cometiendo un ilícito. Lo único que podría hacer la policía sería inmovilizarlo, dijo.
El gobernador leyó un convenio que firmaron representantes de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y el gobierno del estado el 22 de septiembre de 1999, en el que el gobierno federal entrega al de Colima, para su conservación, un tramo carretero de un kilómetro, en el que se ubica Figura obscena.
Cavazos Ceballos negó que la citada vialidad sea municipal y calificó la actuación del edil panista "como un capricho" encaminado a ganar una nota de carácter nacional y como una acción electorera que busca incitar a la violencia.
Aunque invitó a Morán Sánchez a dialogar y se dijo dispuesto a realizar una encuesta para saber si la mayoría de los capitalinos desea la reubicación de la escultura o no, al final el mandatario estatal manifestó que no permitirá que nadie viole el estado de derecho y admitió que ya había policías apostados en el lugar para que actúen en caso necesario.
Cerca de las 22 horas el alcalde también ofreció una conferencia de prensa para comentar que ante esa postura él se retiraba del lugar "para no exponer a los trabajadores", pero que el cabildo iniciaría un proceso legal para conseguir su objetivo. Poco antes había advertido que si a las 21 horas de este sábado no lo autorizaban a quitar la obra, lo haría él mismo y la colocaría en el complejo administrativo del gobierno estatal, que se ubica a unos 100 metros de la plazoleta donde se encuentra actualmente.
Sergio Alejandro Solís Vergara, presidente de Colegio de Arquitectos del Valle de Caxitlán, dijo por su parte que varias veces pidieron al presidente municipal de Colima que removiera la escultura de la glorieta "porque no es del agrado de los colimenses.
"Esta obra monumental de José Luis Cuevas es, como su nombre lo indica, una figura obscena y creo que las obscenidades a nadie nos gustan. Si para el señor Cuevas ésta es una obra de arte, y así puede ser considerada, definitivamente tiene que estar en otro lugar, no en la entrada principal de la ciudad", concluyó.