Gratuidad del transporte, exigen; tomados, al menos 100 colegios de secundaria
En huelga, más de 100 mil estudiantes chilenos
Ampliar la imagen Estudiantes demandan en Santiago el retorno de la educación pública al Estado chileno Foto: Ap
Santiago, 26 de mayo. El movimiento chileno de estudiantes de secundaria tomó hoy gran fuerza con más de 100 mil alumnos en huelga y alrededor de 100 colegios "tomados", en lo que constituye la primera gran movilización social que enfrenta la presidenta Michelle Bachelet desde su asunción en marzo pasado.
Más aún, el gobierno de la Concertación Democrática se vio obligado a dejar de lado su postura inicial de no dialogar "bajo presión", al convocar para el próximo lunes a una mesa de negociación con todos los estudiantes, incluyendo los de colegios que son mantenidos ocupados o tomados por los estudiantes.
Además, la mandataria convocó a una reunión de emergencia con los líderes de todos los partidos políticos integrantes de la coalición gobernante, a fin de analizar una salida para el conflicto y luego de que varios legisladores oficialistas se declararon en favor de los reclamos de los jóvenes por una restructuración completa de la educación chilena.
"Creo que efectivamente en este gobierno tenemos que volver a hacer una reforma, aumentar la calidad de la educación, de manera de aumentar también la excelencia", admitió Bachelet, tras una reunión en la que con su ministro de Educación, Martín Zilic, se aceptó establecer el diálogo abierto y amplio con los huelguistas.
Los estudiantes, que cuentan con el apoyo de los gremios de universitarios y profesores, además de la Central Unitaria de Trabajadores, anticiparon sin embargo una gran movilización nacional para el próximo martes en caso que no se logren avances o señales de acercamiento en la reunión del lunes con las autoridades.
Las movilizaciones estudiantiles se iniciaron a principios de mayo con multitudinarias protestas callejeras, que entonces derivaron en disturbios con la policía y decenas de detenidos, en reclamo de la gratuidad de un pase escolar para el transporte público y que el examen de acceso a las universidades sea sin costo alguno.
Pero a medida que el conflicto comenzó a extenderse por el país, las demandas se ampliaron con peticiones como la reformulación de la llamada "jornada escolar completa" y la derogación de la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza, promulgada en el último tramo de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Esta última medida puso la educación estatal de los colegios públicos en manos de los municipios, cuya política obró en detrimento de la calidad de esas escuelas frente a los colegios privados. Por ese motivo, ante problemas financieros, entre otros, ahora los estudiantes de secundaria están pidiendo el retorno de la educación pública al Estado.