"Arrodillados", los políticos han sido incapaces de regular la publicidad comicial

Televisoras, mayor negocio privado financiado por el erario: Corral

Se debe legislar para evitar "la dictadura del espot y la tiranía de encuestas", advierte el panista

Ahorro de $2 mil 600 millones si se usaran para las campañas los tiempos oficiales en radio y tv

ANDREA BECERRIL

Es imprescindible que el Congreso legisle para frenar el enorme dispendio de partidos y candidatos en los medios electrónicos, particularmente en la televisión, la que se lleva todas las ganancias del "mayor negocio privado con recursos públicos", advirtió el senador del PAN Javier Corral Jurado.

Destacó que los políticos están "arrodillados" frente a las televisoras, y ni siquiera han sido capaces de generar las reglas necesarias para disminuir el costo elevado y desigual de la publicidad electoral, "las carretadas de dinero a unos cuantos".

Experto en el tema, Corral Jurado consideró que incluso es necesario prohibir la contratación de espots en radio y televisión y utilizar los tiempos de Estado para la difusión de mensajes de candidatos y partidos, lo que ahorraría al erario unos 2 mil 600 millones de pesos.

En ese sentido, explicó que la oposición férrea a que se aprobara el proyecto de dictamen de Ley Federal de Radio y Televisión -que se trabajó por lo menos tres años en el Senado- fue precisamente porque propone medidas para evitar que continúe "la dictadura del espot y la tiranía de las encuestas".

El legislador señaló que cada año el gasto electoral se incrementa en el país, y sólo de 2000 a 2006 creció 45 por ciento, ya que a la par se ha elevado el costo de los espots en los medios electrónicos.

-La Jornada publica hoy que 71 por ciento de los anuncios de los partidos se fueron a la televisión -se le recordó.

-Este es el dato más grotesco de toda esta etapa no sólo de subordinación y dependencia casi existencial de la clase política a la televisión, pues además de entregarle todo tipo de canonjías, tanto por la vía del Ejecutivo como por la del Congreso -a partir de leyes hechas a su modo-, la enriquecen. Los partidos políticos son correas de transmisión de dinero público a unas cuantas manos privadas.

Agregó que esas erogaciones constituyen "uno de los gastos más escalofriantes del dispendio y de la campaña de dinero. Primero, porque hoy más que nunca tenemos debilitado el sistema de partidos, pero las televisoras están enriquecidas por ellos".

En lugar de un Estado fuerte, con un sistema de partidos consolidado y empresas de comunicación abiertas a la competencia, "lo que tenemos es un reforzamiento del duopolio televisivo con dinero público. Debo decir que se trata de uno de los mayores negocios privados con recursos de la nación, porque se llevan el mayor porcentaje del gasto electoral en México, sobre todo la televisión, y fundamentalmente Televisa, a través de propaganda electoral; transmiten a través de bienes de la nación que les han concesionado.

"¡Negocio redondo! Financiarse con recursos públicos y explotar bienes de la nación. Este es uno de los datos más contradictorios de la clase política mexicana, que consciente de este dispendio, de este gasto excesivo, no ha generado reglas que por lo menos le permitan ahorrarse esos miles de millones de pesos", agregó el panista, quien lleva a cabo un recorrido por varias universidades del país para explicar lo que representa la ley Televisa.

Los partidos y los candidatos -recalcó- están arrodillados ante las televisoras, pero al mismo tiempo se constituyen en sus principales financiadores, lo que ha producido este "modelo espotero de campaña. La dictadura del espot, la tiranía de las encuestas".

En la actualidad, las campañas políticas son un tonel sin fondo en relación con los medios electrónicos, debido a que "el modelo electoral que vivimos es uno mediático de sustitución de las ideas por la imagen, donde cobra absoluto sentido lo amplio visual sobre lo programático y lo ideológico".

Es un modelo -detalló- que ha sustituido la palabra, el compromiso, la racionalización de propuestas y está enfocado a la explotación de los sentimientos. "Se concentra en explotar imágenes y frases que se encierran en algunos puntos, y la televisión está encantada, porque no tiene por qué generar espacios de reflexión y de debate, sino sólo de atizar el escándalo, para que luego sean los espots los que diriman el nivel de la contienda".

Corral Jurado recordó que en el proyecto de dictamen de Ley Federal de Radio y Televisión que quedó congelado en el Senado se proponen varias medidas para ahorrar recursos al Estado y para generar condiciones de equidad en la contratación de la publicidad.

Se establece que el Instituto Federal Electoral es la instancia exclusiva para la contratación de la publicidad comicial, con la facultad de fiscalizar los recursos durante todo el proceso de campaña, no sólo después, para que pudiera evitar las desigualdades, entre ellas el precio, "la tarifa diferenciada, el trato privilegiado, las condonaciones en especie, el paqueteo informativo con publlicidad, la venta de entrevistas, que son productos que se añaden al espoteo".

Igualmente, se propone un sistema mixto de propaganda electoral, porque 50 por ciento podría contratarla el IFE, y la otra mitad se haría usando los tiempos oficiales que tiene el Estado en su favor en radio y televisión para el mensaje de los candidatos y la promoción del voto. De hecho, para eso deberían servir hoy los tiempos de Estado, ya que ahorrarían enormes recursos a la nación, pero por eso "embistieron con todo el proyecto de dictamen".