El colectivo presenta exposición en San Ildefonso
Bulbo cuenta historias de Tijuana y San Diego que omiten los medios
Ver a Tijuana ''como si te fueras con tu primo que vive allá" es como Carla Pataky describe la visita a la exposición Historias que no venden, organizada por el colectivo Bulbo e inaugurada en el pasado 18 de mayo en el Antiguo Colegio de San Ildefonso.
Mientras en los medios de comunicación se ven asaltantes, encajuelados, prostitutas, la Revolu (la calle Revolución), ''donde está todo el party más grotesco", los migrantes, los proyectos de Bulbo cuentan historias de Tijuana y San Diego significativos en la vida fronteriza, realidad de la que forman parte personas luchonas, creativas, que hacen cosas. Pero como son historias que ''no venden", no están en los medios de comunicación y pasan inadvertidas, expresa Pataky, responsable del área de televisión de Bulbo.
Fundado en 2002, el colectivo Bulbo comenzó de hecho con el programa de televisión en Tijuana, que durante año y medio se transmitió por Canal 22 y ahora sólo pasa por el Canal 52MX de MBS. De allí surgió la necesidad de crecer en otros medios, como la publicación bimensual Bulbo Press, sitio en Internet en el que se transmiten programas de radio y video, un sello discográfico donde han editado dos compilaciones de música de la frontera. También han participado en intervenciones de arte público y han hecho enlaces por Internet con Zaragoza, España, y Manchester, Inglaterra.
Aunque los 15 integrantes de Bulbo no se consideran artistas, con ese carácter fueron invitados a la pasada versión de Insite, donde participaron con el proyecto La tienda de ropa, basado en la colaboración de siete personas que no se conocían -un abogado, una diseñadora de interiores y una bailarina, entre otros-, pero que debían ponerse de acuerdo para diseñar prendas.
También fueron invitados a crear una bandera para la presente edición de la Bienal Internacional de Estandartes, para lo que solicitaron a diversas personas que donaran una prenda significativa para ellas. En un video cada quien explica por qué la donó.
Todo esto se verá reflejado en la muestra Historias que no venden. En uno de los espacios, por ejemplo, se proyecta el documental Agressive skating (Patinaje agresivo), en el que se ven ''morros que patinan en roller blades". Pataky explica que no consumen drogas, no son delincuentes, sólo salen a la calle a patinar, pero les pasa de todo: la policía los persigue y deben esconderse.
En otro documental, Sana rabia, sobre un movimiento sonoro de hard core en Tijuana y San Diego, los jóvenes explican por qué hacen un tipo de música que las personas juzgan como puros gritos.
A pregunta expresa, Pataky afirma que los temas de Bulbo no están politizados, no obstante que en una sección dedicada a los ambulantes uno cuenta que se iba a pasar al otro lado, pero ya no lo hizo porque la vida allá no le gustó. Y apunta:
''Tijuana resulta interesante para muchas personas por este rollo de la frontera. Pero, para los tijuanenses, we're over it (ya lo superamos).
''La realidad de los tijuanenses es que hubiera tenido que hacer dos horas de fila, entonces, mejor me quedé.
''La gente de Tijuana vive allí porque quiere. Muchos tienen oportunidad de vivir del otro lado y no se van. Cruzan diario a trabajar. Hay muchas personas como yo, que soy residente legal en Estados Unidos, pero vivo en Tijuana porque me gusta más y es más barato."
(Historias que no venden, que concluirá el 1º de julio, se presenta en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, en Justo Sierra 16, Centro Histórico.)