Visita el canciller brasileño La Paz para "atender asuntos bilaterales pendientes"

Bolivia y Brasil darán "encuadre político" a la negociación el nuevo precio del gas

Pactan buen trato a campesinos brasileños afectados por la reforma agraria de Evo Morales

ROSA ROJAS CORRESPONSAL

La Paz, 22 de mayo. Los gobiernos de Bolivia y Brasil acordaron hoy darle un "encuadre político" a las negociaciones sobre el nuevo precio del gas que la estatal brasileña Petrobras importa desde el país andino, así como un trato "no autoritario" a los agricultores brasileños que podrían verse afectados por la anunciada reforma agraria del presidente boliviano, Evo Morales.

Los acuerdos fueron resultado de una visita que el canciller brasileño, Celso Amorim, realizó domingo y lunes a esta capital, donde afirmó que "no hay conflictos, hay cuestiones que tenemos que mirar con visión constructiva, de sociedad y de amistad".

La visita de Amorim tuvo el objetivo de fortalecer las relaciones diplomáticas entre ambos países, perjudicadas por la nacionalización de los hidrocarburos decretada por el presidente boliviano, Evo Morales, el 1º de mayo pasado.

Bolivia vende el gas a Brasil a la mitad de la cotización internacional (3.8 dólares el millar de unidades térmicas británicas, BTU), y tras la nacionalización, La Paz anunció su intención de elevar 65 por ciento el precio del hidrocarburo.

Como parte de las consecuencias de la nacionalización, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales de Bolivia, Jorge Alvarado, informó hoy de la cancelación de un contrato con la empresa estadunidense Degolyer and McNaughton para la certificación de las reservas de hidrocarburos del país, "porque entregaba datos falsos", sobredimensionados.

Durante su estancia en La Paz, Amorim se reunió cerca de una hora con el presidente Morales, quien según el funcionario brasileño, le reiteró que Bolivia considera "estratégica" la relación con Brasil.

Los gobiernos decidieron crear comisiones técnicas para atender los asuntos pendientes sobre energéticos, migración y tierras, tema que preocupa a Brasil dado que cerca de un centenar de ciudadanos de ese país han sido emplazados al desalojo por tener propiedades dentro de la franja fronteriza de 50 kilómetros, algo que está prohibido por la Constitución boliviana.

El canciller boliviano, David Choquehuanca, señaló al respecto que "en Bolivia hay una resolución de desalojo" de los ciudadanos brasileños que se encuentran asentados ilegalmente en la frontera.

"Se han encontrado asentamientos ilegales de brasileños y bolivianos en tierras fiscales (y) tanto unos como otros serán desalojados", subrayó.

En el departamento de Santa Cruz -en el sureste del país-, el prefecto (gobernador) Rubén Costas y el presidente del Comité pro Santa Cruz, Germán Antelo, subieron el tono de sus declaraciones sobre el tema de la tierra, con críticas al gobierno de Morales y su declarada intención de revertir al Estado unos cuatro millones de hectáreas de latifundios improductivos, a fin de repartirlas entre campesinos y pueblos originarios.

Rubén Costas advirtió que los cruceños defenderán "a ultranza lo que les pertenece", y advirtió que "no nos obliguen a utilizar nuestro legítimo derecho a defendernos, no nos agredan, no somos tierra de expansión ni piso de ninguna cultura imperialista".

El departamento de Santa Cruz convocó para el 2 de julio a un referendo sobre su autonomía.

El inicio de la campaña por el "sí" coincidió con la fiesta popular conocida como Día de la Tradición, que fue aprovechada por algunos grupos para portar letreros con leyendas que señalaban: "Chávez ¡devolvéme mi país!", "Yo quiero tener los mismos derechos de un cubano y de un venezolano. ¡Viva Bolivia!"

En esa región, la Cámara Agropecuaria de Oriente afirmó hoy que ya hay cuatro predios invadidos en la zona de Guarayos y exigió que el gobierno cumpla su compromiso de desalojar a los invasores. Ante esta denuncia el Instituto Nacional de la Reforma Agraria informó del envío de una delegación para clarificar la situación en la zona.