DISQUERO
La clemencia de Mozart
El estreno en México de Ascanio in Alba, ópera fascinante pero poco conocida de Mozart en versión de concierto el próximo viernes 26 y el domingo 28 en la Sala de Conciertos Nezahualcóyotl, así como su coincidencia con la aparición de distintas versiones discográficas de ese género llevado a niveles supremos por el autor austriaco de quien se conmemora todo este año su cumpleaños 250, habilita una revisión somera de ese territorio mozartianísimo.
La más importante de las grabaciones referidas es la correspondiente a La clemenza di Tito, la última de las 20 óperas que escribió Mozart (Ascanio in Alba fue la quinta) y es al mismo tiempo la más reciente grabación que llega a México de la mezzosoprano checa Magdalena Kozena, de quien reseñamos en el pasado Disquero su anterior disco y quien ya grabó uno más, dedicado también a Mozart, junto a su esposo, el director de orquesta sir Simon Rattle.
En esta espléndida versión de La clemenza di Tito, la mezzo nacida en el mismo país donde Mozart terminó de escribir esta ópera, interpreta el papel de Sesto, originalmente escrito para voz de castrato. Magdalena Kozena dota a esta grabación de una atmósfera sublime, tersa, insólita en cuanto su tesitura inigualable contiene el aroma sedoso que solamente las cantantes eslavas desarrollan de manera idéntica a como florece una orquídea.
El maestro Charles Mackerras, reconocido especialista mozartiano, dirige a dos orquestas conjuntadas en una para esta hazaña: la Scottish Chamber Orchestra, que arropa en sus filas a la Freiburg Baroque Orchestra, que es uno de los mejores conjuntos de su tipo en toda Europa.
De manera que en esta grabación se conjuntan artefactos modernos con instrumentos de época, sonido peculiar que en manos expertas, las del director Mackerras, nunca decae la extrema tensión dramática de esta ópera, que es por lo general menospreciada debido a que el texto original, escrito hace demasiados años por Metastasio, es en realidad acartonado, anticuado y poco propicio, pero que en manos geniales, las de Mozart, quien dispuso que el poeta, coetáneo suyo, Caterino Mazzoli, reviviera ese material para el libreto que finalmente en la partitura brinda pasajes considerados entre la mejor música que compuso Mozart en toda su vida.
Además de Magdalena Kozena cantan en ésta que es una nueva versión, es decir un tratamiento retrabajado de la partitura original, otras figuras fundamentales del panorama operístico actual: Rainer Trost en el papel protagonista (Tito Vespasiano), Hillevi Martipelto, Lisa Milne, Christine Rice y John Relyea.
Mozart plasma en esta música prodigiosa el ocaso de las civilizaciones y una notable introspección sicológica. Al final, ante la Roma en llamas como fondo, esplende su decisión de inclinarse, a pesar de traición y celos, no hacia la venganza, sino hacia la clemencia. De ahí su título. De ahí la grandeza de esta música de amor.
Pablo Espinosa