En Guanajuato, el partido en el poder practica su versión del corporativismo
AN utiliza programas sociales como instrumento electoral, acusa la UIA
Relegado, el combate a la pobreza; una quimera, los 1.4 millones de votos prometidos
Ampliar la imagen Según un investigador de la Universidad Iberoamericana, campus León, el Partido Acción Nacional utiliza programas sociales con fines electorales Foto: Martín Diego Rodríguez
León, Gto., 18 de mayo. El Partido Acción Nacional (PAN) utiliza programas sociales de los gobiernos federal y estatal para coaccionar el voto de personas de bajos recursos mediante de una nueva forma de corporativismo, consideró el investigador de la Universidad Iberoamericana (UIA), campus León, David Martínez Mendizábal, coordinador del programa universitario contra la pobreza en dicha institución.
En entrevista, el académico recordó que en el plan de gobierno 2000-2006, el mandatario estatal panista, Juan Carlos Romero Hicks, ubicó a la lucha contra la pobreza como el tercer punto en sus prioridades, después del desarrollo económico y la infraestructura urbana. "Ahora, en el documento del plan de desarrollo 2005-2030, es decir un año antes de las elecciones, el gobierno estatal volcó la vista hacia los campesinos, los pobres, las colonias populares" con el fin de coaccionar el sentido del voto usando el argumento de la continuidad de los beneficios de los programas sociales.
Mencionó como ejemplo un trabajo de campo que realizaron investigadores involucrados en el programa universitario contra la pobreza, auspiciado por la UIA: el delegado rural de la comunidad La Laborcita, de quien no proporcionó el nombre, "abiertamente ha señalado a los beneficiarios del programa Oportunidades que voten por el PAN, porque es ese partido quien les está dando el cheque, y si votan por otro partido no van a tener ese beneficio.
"El delegado, quien por normatividad es nombrado por el alcalde y ratificado por los regidores, le dice a la gente, según la investigación que tenemos nosotros en camino, que quien da el dinero es Vicente Fox, y que hay que votar por su partido", acotó.
Martínez Mendizábal, quien coordina la publicación Cuadernos sobre la equidad, editada por la UIA-León, manifestó que el uso partidario de los programas sociales es algo común.
Recordó que en 2003 -cuando se renovaron las alcaldías y el Congreso de Guanajuato- "se colocó en la estructura de la Secretaría de Desarrollo Social estatal a cuadros panistas relevantes" como el ex alcalde de Salamanca, Justino Arriaga Silva, "quien no tiene la trayectoria social que respalde su nombramiento, y su perfil no es ni social ni humano, sino es un perfil partidario".
Comentó que "con esos cuadros partidistas dentro de las dependencias que manejan apoyos sociales y programas de gobierno en favor del desarrollo social, lo que hacen es partidizarlos, dejando en segundo plano la misión de erradicar la pobreza".
Además consideró que la estructura del PAN para la coacción del voto con recursos públicos se ha "refinado, por decirlo de alguna manera, pues han utilizado no sólo a los rostros visibles sino a los agentes intermedios y también a quienes están en contacto directo con la gente, orientando el voto a un partido determinado, y eso es contra la ley".
El sociólogo también se refirió a la meta de votos impuesta por Acción Nacional en un panorama electoral adverso, pues "en Guanajuato ese partido ha comprometido un millón 400 mil votos (a los abanderados panistas), ¿cómo lo van a lograr si la gente está harta de su gobierno?
"La respuesta se encuentra en la estructura corporativista que hoy es un fenómeno enquistado en Guanajuato a partir del Consejo General del Trabajo (símil panista de la Confederación de Trabajadores de México), de la Liga de Acción Agropecuaria (análoga a la Confederación Nacional Campesina), que son un brazo corporativo del PAN, y a donde se destinan recursos federales y estatales y donde se condiciona el voto a cambio de prebendas de la estructura de poder", afirmó.