LA MEGABIBLIOTECA

Patronato: prisa política de Fox por inaugurar el proyecto

El director del organismo afirma que no darán recursos hasta que se resuelvan las dudas que se tienen con el gobierno

La prioridad debe ser la digitalización de documentos sobre México, dice

ARTURO JIMENEZ

El Patronato de la Biblioteca José Vasconcelos, conocida como la megablioteca, que el presidente Vicente Fox deberá inaugurar este martes, no ha dado ni dará "un solo peso" mientras no se resuelvan las muchas definiciones pendientes de ese proyecto, cuya concreción está sostenida "con alfileres".

Pablo García Sáinz, director de dicho patronato, el cual encabeza el empresario Alejandro Burillo Azcárraga, presidente del Grupo Pegaso, comenta en entrevista que entre los pendientes se encuentran:

El término real de las obras de construcción y su acondicionamiento, la definición de sus políticas, el nombramiento de un director especializado; pero sobre todo, la decisión clara de convertirla en una institución moderna, de primer nivel y que integre y provea a las alrededor de 7 mil bibliotecas públicas del país, para lo cual es indispensable la digitalización de miles de libros y documentos importantes sobre México dispersos en el país y el extranjero.

De entrada, García Sáinz, ex director de la Fundación Cultural Televisa, rechaza versiones periodísticas que han difundido "dos grandes imprecisiones": qla primera, que uno de los objetivos del patronato de la megabiblioteca es aportar los recursos necesarios para su funcionamiento, lo cual "no es posible" porque la nueva institución ya depende de un presupuesto público federal otorgado mediante la Secretaría de Educación Pública y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA).

La segunda imprecisión se refiere a que el patronato habría aportado 200 millones de pesos para equipar la Biblioteca José Vasconcelos. Nunca, asegura, se aportó un solo centavo, y esa afirmación le parece grave y preocupante por dos razones:

"Una es que esos 200 millones de pesos tendrían que estar registrados y controlados por la Secretaría de la Función Pública. Y otra es que los patronos tendrían que haber dado ese donativo al patronato para que éste, a su vez, lo diera a la Biblioteca Vasconcelos.

"Nunca hemos dado un solo peso, no tenemos cuentas bancarias ni jamás ha operado el patronato, el cual se constituyó para apoyar a la Biblioteca Vasconcelos en la digitalización de la obra, pero nunca nos pudimos poner de acuerdo en qué digitalizar", señaló.

Entre los miembros del patronato de la megabiblioteca, instalado en abril de 2005 por el presidente Vicente Fox y que en este mes de mayo deberá elegir nuevo presidente, también se encuentran empresarios, intelectuales y personalidades como Sergio Autrey, Clemente Serna, Miguel León-Portilla, Carlos Fuentes, Vicente Quirarte y Jacobo Zabludovsky.

Tecnología, no sillas

Pablo García Sáinz insiste en que la única función del patronato sería apoyar a la megabiblioteca en el proceso de digitalización. "Ojalá y se le dé la función que se requiere: que sea realmente una biblioteca nacional en la que se puedan consultar los archivos y documentos sobre México que existen en el país y dispersos en diferentes bibliotecas y centros de cultura del mundo.

"Esa sí es la aportación que busca el patronato: digitalizar toda esa información para que se concentre en la Biblioteca Vasconcelos y pueda estar al servicio del pueblo de México."

Cabe recordar que el primer presidente del patronato fue el empresario Bernardo Domínguez Cereceres, de quien los patronos pidieron su renuncia ante un presunto fraude millonario cometido contra el Fonatur.

García Sáinz comenta que al parecer en ese primer momento se habían pedido aportaciones al patronato para el equipamiento de la megabiblioteca. "Pero cuando el señor Burillo llegó a la presidencia del mismo se dijo que no había por qué equiparla con bienes muebles o enseres porque la función era apoyar la obra verdaderamente importante de su digitalización, no dotarla de sillas."

Considera que ante la inminencia de las elecciones en julio y del cambio de administración federal en diciembre, el funcionamiento normal de la megabiblioteca podría comenzar de lleno para el año próximo, pues la inauguración de este martes será parcial.

"Está todo pendiente. Se inaugura porque es el último acto realmente político que puede llevar a cabo el señor presidente y quieren mostrar esta biblioteca como la gran aportación a la cultura del sexenio."

-¿Y sí representa una gran aportación?

-Es un edificio extraordinario, maravilloso, ojalá y cumpla todas sus funciones: que sea la biblioteca cerebro para poder estructurar el sistema de bibliotecas públicas, más de 7 mil, para que tengan acceso al gran acervo nacional, y después, ojalá lo acepte la Dirección General de Bibliotecas, se pueda incorporar la enorme cantidad de documentación sobre México que existe fuera del país: Austin, Viena, París, El Vaticano.

"El objetivo es que verdaderamente sea una biblioteca nacional de alta cultura, y no una simple biblioteca nacional de consulta, como se está planeando actualmente, para servicio de jóvenes a nivel escolar. Eso es en lo que no hemos estado de acuerdo."

El paréntesis electoral

-¿Qué tiempo llevaría y cuánto costaría la digitalización? -se le pregunta a García Sáinz.

-No tenemos idea, porque el primer problema es que se decida qué realmente se vaya a digitalizar. Segundo, que se renueve la presidencia del patronato, que tiene duración de un año, y el nuevo responsable establezca la relación con las autoridades. Y tercero, saber qué importancia le darán a la biblioteca el próximo sexenio.

"Eso es parte de todo lo que no se ha definido. Ni siquiera se ha nombrado al director de la biblioteca. Jorge von Ziegler es el director general de Bibliotecas del CNCA, pero una biblioteca de esta importancia merece un director muy especializado y requiere la participación de todo un sistema de bibliotecarios, que no tiene. Todo es muy incipiente y está sostenido con alfileres."

La concreción del proyecto, continúa, está sujeta al proceso electoral, a las nuevas políticas que surjan, a los presupuestos que vayan a asignar, a que se cumpla con el compromiso de llegar de 500 mil a un millón y medio de libros, a que se establezca la red interna y, sobre todo, al proceso de digitalización, "que es en la única parte en la que participaría, como apoyo, el patronato".

Ese sólo rubro, dice García Sáinz, sería un trabajo a largo plazo. "Si pudiéramos establecer los contactos y las redes para poder obtener la digitalización de los documentos y libros relativos a México que se encuentran en el extranjero, sería un trabajo de años con un costo enorme. Esa sería la gran aportación del patronato, pero no con el esquema actual. Para lo actual, lo que se va a inaugurar, no hemos dado nada. Queremos que eso quede muy claro."

Fox visita el edificio

El presidente Vicente Fox realizó ayer un recorrido de supervisión de los últimos avances de la construcción de la Biblioteca José Vasconcelos, que en breve será inaugurada, según informó la Presidencia de la República.

Luego de su gira por Europa, el mandatario dio las últimas indicaciones de esta obra.

Acompañado de su familia, el jefe del Ejecutivo constató los trabajos que se realizan en la biblioteca que contará con más de dos millones de libros disponibles, así como con más de 750 computadoras conectadas a Internet.

Con información de José Antonio Román