CUMBRE UE-LATINOAMERICA
Finaliza con raquíticos acuerdos la cuarta reunión Europa-AL
No fue atendido el reclamo brasileño de que europeos reduzcan subsidios a la producción agrícola
Se comprometen las 60 naciones participantes a continuar promoviendo una asociación estratégica
Ampliar la imagen El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, desayuna con la canciller de Alemania, Angela Merkel (derecha), poco antes de la reunión final Foto: Ap
Viena, 12 de mayo. La cuarta cumbre América Latina, el Caribe y Unión Europea culminó este viernes aquí con una declaración final que exalta el "fortalecimiento continuo" de la alianza estratégica birregional. Sin embargo, el documento omitió dos temas que acompañaron los debates entre los mandatarios: la condena de algunos al "populismo" y el reclamo brasileño para que Europa reduzca subsidios a la producción agrícola y dé un "impulso político" a las negociaciones en la Organización Mundial de Comercio.
Los jefes de Estado y de gobierno de 60 países firmaron un texto que desglosa en 59 puntos sus coincidencias, entre las que destaca el acuerdo para iniciar la negociación de un tratado comercial y político entre la Unión Europea y Centroamérica, así como el comienzo de pláticas para avanzar hacia un pacto similar con los países de la Comunidad Andina de Naciones.
Al margen del documento final, también quedaron temas y pronunciamientos como el que fue planteado por el presidente del Parlamento Europeo, el socialista catalán Josep Borrell, quien dijo que la Unión Europea no debe preocuparse por el "giro a la izquierda" de algunos países de América Latina, sino que debe servir para impulsar la cooperación interregional.
En su papel de copresidente de la conferencia, cargo que le permitió ser orador frecuente, el presidente Vicente Fox aseveró que el futuro de América Latina y de sus pueblos pasa necesariamente por la integración del continente.
Con diferentes matices, el gobernante mexicano repasó sus reiteradas críticas contra el populismo, estrategia a la cual definió como "uno de los grandes obstáculos para el crecimiento de desarrollo" y "una salida falsa para el combate a la pobreza".
En cambio, ubicó la ruta de construcción de la Unión Europea (bloque integrado por 25 naciones) como un modelo exitoso que debe servir de ejemplo a América Latina, en donde "no hemos podido solucionar muchos de nuestros problemas históricos por el constante cambio de modelos de desarrollo, la falta de consistencia en la aplicación de políticas públicas y el populismo".
Agregó Fox que es necesario avanzar en torno a los esquemas subregionales, con base en valores fundamentales como la humildad y la solidaridad. Sin mencionar nombres, advirtió el mandatario a sus homólogos de ambos lados del Atlántico que "la prepotencia y la arrogancia no pueden tener cabida entre nosotros".
América Latina -insistió- "no debe detener el paso; por el contrario, debe acelerar sus procesos de integración, hacerlos exitosos, como el caso europeo, para que podamos tener aspiraciones reales a la prosperidad, a la formación de capital humano y a la reducción de la pobreza".
Luego, introdujo los temas de migración y lucha contra el terrorismo, como los fenómenos que deben atenderse también por la vía de acuerdos conjuntos y cooperación entre las naciones.
La crítica de Fox al "populismo" fue respaldada por el titular de la Comisión Europea, el portugués José Manuel Durao Barroso, y por casi todos los gobernantes participantes en la cumbre, en especial el presidente de Perú, Alejandro Toledo, quien advirtió que si no avanza la integración, la pobreza regional "puede conspirar contra la democracia".
"El populismo -reiteró el mandatario peruano lo dicho el jueves a la prensa- empieza con una fiesta de noche y termina con un funeral al día siguiente".
Diálogo Bolivia-España
En los encuentros bilaterales, mientras tanto, se destacó el compromiso de España y Bolivia de iniciar un proceso de diálogo que derive en un acuerdo comercial en torno a los energéticos.
El ambiente entre los representantes de esas naciones se relajó luego que el mandatario boliviano, Evo Morales, entregó a su homólogo español una carta aclaratoria en la que precisa los objetivos de la nacionalización de los hidrocarburos en su país -anunciada el primero de mayo pasado-, así como los fines de la relación que desea mantener con los inversionistas españoles.
En la Declaración de Viena, integrada por 59 puntos, se establece que "los jefes de Estado y de gobierno participantes" reiteran su compromiso para seguir promoviendo una asociación estratégica birregional, con base en los avances de las conferencias cumbres anteriores celebradas en Río de Janeiro, en junio de 1999; Madrid, en mayo de 2002; y Guadalajara, en mayo de 2004.
El equipo del presidente Fox aseveró que la delegación cubana -nación que no participa de ningún acuerdo comercial con la Unión Europea- también firmó la declaración final.
No se precisó si finalmente el mandatario venezolano, Hugo Chávez, adhirió a la misma, aunque por la mañana declaró que bloques regionales como el Grupo de los Tres (formado por México, Colombia y Venezuela) "no sirven para nada".
Dijo también que la Comunidad Andina de Naciones "ya fue destrozada con la firma de tratados comerciales de Perú y Colombia con Estados Unidos".
Los mandatarios participantes acordaron que la próxima cita será en Perú, en 2008, y en general se dieron por satisfechos por los acuerdos de la cumbre, pero el presidente de Argentina, Néstor Kirchner -durante el discurso ante el pleno de los mandatarios-, no dejó pasar la oportunidad para reclamar a Europa que la cooperación birregional sea "de hechos y resultados, no discursiva".