Se presentará del 17 al 21 de mayo en el Auditorio Nacional
La compañía Virsky trae el espíritu libertario ucraniano a México
Ucrania es un país que sí se preocupa por la cultura, expresa su director artístico
Necesario, ''implantar en las almas de los niños las semillas del arte''
Ampliar la imagen Algunos integrantes de la Compañía Nacional de Danza de Ucrania Virsky, cuyo elenco de casi un centenar de personas incluye 15 niños seleccionados entre los 280 que estudian en la escuela de esa institución cultural Foto: Cortesía Ars Tempo
El espíritu de amor por la libertad del pueblo ucraniano llega a tierras mexicanas por medio de la Compañía Nacional de Danza de Ucrania Virsky, que se presentará del 17 al 21 de mayo en el Auditorio Nacional, con un elenco que incluye alrededor de 100 elementos, entre ellos 66 bailarines, 15 niños aún estudiantes y 15 músicos.
En 2006, Ucrania celebra el 15 aniversario de su independencia, y tanto a los integrantes del Virsky como a los ucranianos les da mucho gusto vivir en su país, con un gobierno propio que sabe ''mejor" lo que tiene que hacer la población, expresa Myroslav Vantukh, director artístico de la agrupación desde 1980, con quien se pudo platicar gracias a la traducción de Marina Lobunskaya.
Integrada por 25 regiones, Ucrania tiene 50 millones de habitantes. Vantukh se remonta a los orígenes y menciona en especial a los cosacos de Zaporozchi, pueblo independiente que siempre defendió a Ucrania de los turcos. A los cosacos también les gustaba cantar y bailar.
Lo que en su orígenes se conoció como el Conjunto de Danza Estatal de Ucrania fue fundado en 1951 por el bailarín y coreógrafo Pavlo Virsky (1905-1977), nativo de Odesa.
Aparte de su entrenamiento clásico, Virsky también se dedicó a la investigación del baile folclórico. A los dos años de su muerte, la compañía fue nombrada Virsky en su honor.
Preparación exhaustiva
No es la primera vez que la compañía Virsky está en México, pues hace tres décadas vino como parte de una gira que también incluyó Estados Unidos.
Vantukh asimismo ya estuvo aquí, cuando fue director y coreógrafo del conjunto de baile de Yunist en Liviv.
El Virsky está subvencionado por el Estado, pero, si bien depende del gobierno, éste también depende de aquél. Al ver esta compañía de danza, explica Vantukh, ''todo el mundo se da cuenta de que Ucrania está estable y que es un país que sí se preocupa por su cultura".
El entrevistado asegura que hay mucha demanda de los padres para que sus hijos ingresen a la compañía. Los niños entran a partir de los seis años, con examen previo. Los seleccionados reciben dos años de entrenamiento primario, impartido por los maestros de coreografía. Al cumplir 8 años los niños deben cursar de nuevo.
Los seleccionados pasan a una segunda etapa donde estudian ocho años más. Tras una década de estudio, los ahora jóvenes vuelven a concursar y los resultados determinan su aceptación en la compañía. Los más destacados tienen la oportunidad de entrar a un master class, llamado el estudio de Virsky.
Tradición, vestuario y léxico coreográfico
Respecto del programa, el director artístico de la compañía Virsky explica que cada región de Ucrania tiene su tradición, su vestuario y su léxico coreográfico, así que ofrecerán ''lo mejor y lo más característico", que vienen a ser ocho o nueve danzas del propio Vantukh, y el resto coreografiado por Virsky.
Y si traen a niños es porque ''el futuro de ellos es el de la nación y su arte".
Para el director hay que acercar los pequeños a la cultura desde muy temprana edad e ''implantar en sus almas tiernas las primeras semillas del arte.
''Queremos que se vea cómo los infantes ya saben bailar profesionalmente. En nuestra escuela tenemos 280 niños y traemos a los mejores."