Todo lo ganado se pierde, al pagarse el doble en importación de materias primas
Canacintra: los ingresos extras por el incremento del crudo, "directo al caño"
Los ingresos extraordinarios que Petróleos Mexicanos (Pemex) capta actualmente por el alza mundial en el precio del crudo resultan sólo "un espejismo" para nuestro país, toda vez que se paga el doble en la importación de materias primas que debe hacer el sector industrial y que podrían ser procesadas aquí si se invirtiera y utilizara toda la capacidad de las plantas petroquímicas.
"Todo lo que supuestamente se gana con los altos precios del petróleo se va directo al caño, se pierde completamente, porque si al país ingresan unos 8 mil 200 millones de dólares por la venta del crudo, llegamos a pagar 15 o 16 mil millones de dólares en materias primas que requiere la industria, desde gasolina, gas natural u otros combustibles que se tienen que importar, hasta productos petroquímicos", manifestó Gilberto Ortiz, presidente del Comité Directivo de Energéticos de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).
Materias primas cuyo precio se incrementa de manera constante de acuerdo con las tendencias del mercado mundial, abundó Gilberto Ortiz, y a ello hay que agregar que por la ruptura de las cadenas productivas en el país el costo repercute aún más en el precio que paga el consumidor final de cualquier producto. "De las materias primas, como los petroquímicos, a los productos ya manufacturados, el incremento llega a ser de hasta 300 por ciento en los costos", aseveró.
Esa pérdida de ingresos extraordinarios se debe, puntualizó, "a la pésima administración del gobierno del presidente Vicente Fox, que en lugar de aprovecharlos en infraestructura e industria los destina a gasto corriente e impuestos, además de que estamos perdiendo reservas de petróleo.
El impacto económico es tan fuerte para la industria en general, pero en particular para los sectores químico y petroquímico, que repercute en los niveles de competitividad y en el constante cierre de empresas, porque al romperse las cadenas productivas por el elevado costo de los insumos resulta preferible importar diversos artículos. "Ahí está, por ejemplo, el caso de la industria química, que tiene un déficit comercial terrible. De casi 7 mil 500 empresas que había en el año 2000, al principio de este sexenio, ahora ya no hay ni mil."
Recordó inclusive que organismos financieros internacionales, como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, "reprobaron" a México hace unas semanas, al denunciar que el gobierno mexicano desperdició la bonanza generada por los altos precios del petróleo, porque los ingresos que obtuvo por ello los destinó a gasto corriente en lugar de invertir en infraestructura.
Si bien el dirigente de la Canacintra añadió que dichos organismos hicieron esas críticas "desde su papel de insistir en las reformas estructurales que permitan la apertura del sector a los capitales privados y extranjeros", confió en que las autoridades por lo menos a ellos sí hagan caso para crear una nueva política energética nacional, ya que han ignorado cualquier llamado que se hace a escala interna.
Alertó además que México debe tomar sus previsiones ante el constante cambio en el panorama energético a escala mundial (sobre todo porque hay una situación muy tensa en Irak e Irán), como ya han comenzado a hacer algunos países de América Latina, como Bolivia, Venezuela, Argentina y Brasil, suscribir acuerdos nunca antes vistos.
Lo que están haciendo dichas naciones, sostuvo el dirigente de la Canacintra, representa "una esperanza para Latinoamérica, porque obviamente demuestran que hay voluntad y capacidad de acción para que los recursos energéticos se orienten al beneficio de sus pueblos y eso necesitamos en México, un cambio en la política energética para aprovechar nuestra riqueza, tanto para transformar localmente el petróleo y el gas como para crear pivotes de desarrollo".
Consideró que "por la mentalidad del gobierno foxista de pretender ligar necesariamente la participación privada, principalmente extranjera, al desarrollo de los energéticos", ha ocasionado muchos problemas y que México se duerma en sus laureles, porque se han retrasado las inversiones en el sector para beneficio del país.
"Yo esperaría que el nuevo gobierno adopte una política más nacionalista y vea hacia Latinoamérica, con cuyos países el actual gobierno no sólo ha descuidado, sino deteriorado, sus relaciones. Pero debemos ver hacia Latinoamérica sin que eso haga creer que tiene que darse un divorcio con Estados Unidos, porque es nuestro principal social comercial y su mercado es tan grande que no puede desdeñarse, pero se trata de dejar de lado una actitud de sumisión y aprovechar los beneficios que implica una alianza comercial con el TLC", concluyó.