Usted está aquí: domingo 7 de mayo de 2006 Economía Pidiregas presionarán finanzas públicas del próximo sexenio

Deberá amortizar pasivos contingentes por 29 mil 179 millones de dólares

Pidiregas presionarán finanzas públicas del próximo sexenio

Especialistas y autoridades han advertido del agotamiento de este esquema financiero

Según Hacienda entre 2008 y 2012, Pemex pagará más de 13 mil mdd y CFE 15,544.5 mdd

ISRAEL RODRIGUEZ J.

La próxima administración del gobierno federal deberá enfrentar amortizaciones por el pago de pasivo contingente de los Proyectos de Inversión con Impacto Diferido en el Registro de Gasto (Pidiregas), figura con la que se han financiado las obras de desarrollo en Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por un monto total de 29 mil 179 millones de dólares, según revelan cifras oficiales preliminares.

Los Pidiregas comenzaron a operar en 1997 para complementar la insuficiencia de la inversión presupuestaria canalizada principalmente a proyectos de infraestructura estratégica, como son las obras de desarrollo de Pemex y la CFE, aunque en algún momento también se utilizaron marginalmente para financiar obras de comunicaciones y transportes.

Sin embargo, algunos especialistas y autoridades del sector energético han advertido en reiteradas ocasiones sobre el agotamiento de este esquema financiero que en el tiempo puede convertirse en una presión para las finanzas públicas debido a que finalmente es deuda.

De acuerdo con el calendario de amortización de los Pidiregas, proporcionado por Pemex y CFE y difundido por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en su Informe trimestral sobre las situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública, entre 2008 y 2012, Pemex deberá pagar 13 mil 634.7 millones de dólares.

En el caso de la CFE las amortizaciones en el mismo lapso ascenderá a 15 mil 544.5 millones de dólares.

Los montos más cuantiosos que deberán ser cubiertos por la petrolera mexicana se concentran en 2008, 2009 y 2010, con 3 mil 79.2 millones, 4 mil 301 y 3 mil 828.9 millones de dólares, respectivamente.

Igualmente, ocurre con los pasivos de la CFE cuyos compromisos de pago también se concentran en esos mismos años. La compañía eléctrica deberá pagar 356.9 millones de dólares, 423.6 y 618.9 millones, en ese orden.

En los últimos años, las inversiones en infraestructura, principalmente en Pemex Exploración y Producción (PEP) han sido cubiertas mediante el endeudamiento contratado vía Pidiregas que ha ido sustituyendo gradualmente la inversión presupuestal.

Inicialmente, los proyectos Pidiregas elegidos por el gobierno federal deben de tener una rentabilidad demostrada y una condición para su autorización que se fundamenta en que el flujo futuro de ingresos que generen por la venta de sus bienes y servicios sea suficiente para cubrir el pago de las obligaciones financieras contraídas, es decir, que generen los ingresos necesarios para amortizar la deuda derivada de su financiamiento.

Algunos críticos de este esquema han alertado en reiteradas ocasiones que estos proyectos resultan en el tiempo más caros comparados con otros mecanismos de contratación de deuda.

Pemex y la CFE podrían obtener créditos más baratos si acudieran a los mercados internacionales de deuda, a los bancos de desarrollo e incluso a las Agencias de Crédito a la Exportación. De acuerdo a un reciente reporte del Grupo Financiero Banamex las erogaciones por Pidiregas han crecido casi 30 por ciento.

Por lo que hace al destino de los proyectos de inversión financiada, en CFE se han concentrado, en primer término, en el segmento de generación dando entrada a los productores privados de energía y, en segundo, en los de transmisión y transformación, mientras que la distribución se llevó a cabo con recursos presupuestales.

En el caso de Pemex los proyectos correspondieron a exploración y producción, refinación y gas y petroquímica básica.

Los proyectos de inversión financiada Pidiregas que forman parte de la inversión física impulsada por el sector público se agrupan en dos modalidades: Los Pidiregas de inversión directa, que comprenden aquellos proyectos que en el tiempo constituirán inversión pública y que por lo tanto suponen adquirir obligaciones financieras que son registradas en la deuda gubernamental, y por otro lado, los proyectos cuya propiedad es del sector privado y que implican únicamente compromisos comerciales, salvo que presenten causas de fuerza mayor que impliquen su adquisición por el gobierno federal.

Según las últimas cifras difundidas por la SHCP, en el primer trimestre de este año, los pagos relativos a los Pidiregas ascienden a 9 mil 808.7 millones de pesos, cifra ligeramente mayor a los 9 mil 182.6 millones de pesos canalizados en el mismo lapso del año anterior.

La deuda relativa a los Pidiergas se extiende hasta el año 2022, por lo que las otras administraciones gubernamentales deberán pagar entre 2015 y 2022 alrededor de 2 mil 338.5 millones de dólares por la amortización del pasivo contingente de este esquema.

 
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