Fox: están puestos los cimientos para un México más próspero y más justo

JOSE ANTONIO ROMAN Y JORGE SEPULVEDA

Al celebrar con los trabajadores de la construcción la fiesta de la Santa Cruz, el presidente Vicente Fox aseguró que el país "está en ruta" hacia un destino mejor, pero llamó a los mexicanos a mantener la unidad y el trabajo, porque éste es el único camino que lleva al desarrollo y a la prosperidad.

En la supervisión de las obras de construcción, primero de la terminal dos del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, y luego en lo que será el nuevo Centro Nacional de Desarrollo de Talentos y Alto Rendimiento, que se prevé queden concluidas en noviembre y agosto respectivamente, al mandatario le invitaron tamales y atole, aunque en el acto de la terminal aérea elementos del Estado Mayor Presidencial obstaculizaron a los reporteros gráficos para tomar fotos a la hora de la mordida al tamal y el sorbo al atole.

Señaló que, en estos cinco años y medio, sociedad y gobierno, junto con los trabajadores de la construcción, han puesto los cimientos de un México más democrático, más próspero y más justo. "Los felicito ampliamente, sigamos echándole ganas para que México sea cada día más grande, más fuerte; hinquémosle las espuelas a nuestro querido México para llegar más rápido, para llegar más fuerte, para llegar todos juntos a nuestro gran destino como nación."

Así, en el Día del Albañil, festividad que forma parte de las tradiciones mexicanas, el presidente Fox les dijo que con su trabajo y esfuerzo, muchas veces arriesgando su propia integridad, se hace posible la construcción de viviendas, escuelas, carreteras, bibliotecas, puertos y toda la infraestructura para el desarrollo del país.

"México les reconoce su trabajo de calidad. Ustedes, en todo el país, están poniendo el cimiento firme, el concreto, los fundamentos para la construcción de esta gran nación", expresó el mandatario, a quien se le vio contento. Luego, en una breve entrevista, informó que su esposa, Marta Sahagún, daría al mediodía una conferencia sobre la decisión del juez en contra de la periodista argentina Olga Wornat y la revista Proceso, quienes fueron sentenciados a pagarle casi dos millones de pesos por "daño moral".

Como en sus mejores épocas de candidato presidencial, cuando prometió un crecimiento económico de 7 por ciento, el presidente Fox llegó con ganas de saludar a quien se le pusiera enfrente y a que le tomaran las fotos del recuerdo necesarias.

A los albañiles les dijo que en esta democracia, ganada en los comicios de 2000, "todos somos indispensables y a cada quien le corresponde poner un granito de arena para ir construyendo a este México, que es la casa grande de todos". Sostuvo que México puede proyectar su futuro para convertirse en una gran nación, porque cuenta con un capital "maravilloso", que es el recurso humano.

Destacó que la construcción es el "gran sector económico" en estos momentos, creciendo a tasas de 8 por ciento. "El producto interno bruto de la construcción es un verdadero dinamo, es un verdadero motor de la economía nacional, está apuntalado, sustentado precisamente en el trabajo de toda esta gente", declaró en una breve entrevista en el aeropuerto.

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