Celebró 52 años con la presentación de 18 grupos
Maratón de baile en aniversario del California Dancing Club
Ampliar la imagen Los amantes del baile disfrutan las tardes y noches en El Califa, como se muestra en esta imagen del a�o pasado FOTO Archivo
En celebración de postín, el California Dancing Club conmemoró el quincuagésimo segundo año de haber abierto sus puertas en el entonces lejano rumbo de la colonia San Simón.
La acostumbrada concurrencia dominical y un puñado de actrices y actores de las telenovelas participaron en el convite que se extendió de un mes a otro, pues comenzó en abril y concluyó en mayo.
Deborah David, una estatua de negra beldad que nació en Guatemala, fue la sorpresa de la noche, pues, sencilla, convivió con el respetable en lo que resultó un maratón de baile, ya que prácticamente sin interrupción los asistentes sacaron brillo a los añosos mosaicos desde las seis de la tarde del 30 de abril hasta pasadas las cuatro de la mañana del lunes de asueto, y ya demasiado exhaustos como para pedirles ir a la marcha obrera, los concurrentes decidieron esperar las primeras corridas del Metro tendidos en el piso, los que no acompletaron para un cuarto en los hoteles cercanos.
Mariana de la Cruz, propietaria del singular salón que no expende alcohol, sólo vasitos de refresco de cinco pesos, explicó que ha instaurado la política de que "preferible que estén aquí y no que los vayan a asaltar allá afuera".
Fueron 18 los grupos que se treparon al escenario del salón, el cual abrió sus puertas en 1954 con un carnet musical encabezado por la orquesta de Larry Son, ¡que tocaba en la W! (los signos de admiración son del programa de mano que se hizo para la ocasión), y se recordaba que todos los camiones que iban hasta Tlalpan se detenían en la parada Bretaña.
No faltaron las actitudes solidarias y desde el entarimado se lanzó la propuesta, a cargo de un niño, de secundar el boicot a los productos de procedencia gabacha.
El Califa, como se le refiere en el argot del barrio, tiene también otros días de actividad semanal, pues los viernes programa música de orquestas y los lunes su majestad el danzón se hace presente.