Usted está aquí: martes 2 de mayo de 2006 Deportes Padres de ajedrecistas piden se llame la atención a dirigente de Pachuca

Rafael Hernández abandonó a su suerte a menores de edad en el Distrito Federal, denuncian

Padres de ajedrecistas piden se llame la atención a dirigente de Pachuca

Uno de los competidores, Uriel Capó, es campeón nacional y participará en la Olimpiada en Turín

JORGE SEPULVEDA MARIN

Padres de familia de Pachuca, Hidalgo, están a la espera de que reciba, por lo menos, un "llamado de atención" Rafael Hernández, presidente de la Asociación de Ajedrez de la entidad "por haber abandonado a su suerte" a los niños que participaron en el Abierto Nacional de la especialidad, que se verificó la semana anterior en el Distrito Federal.

Relataron que a los menores de 10 años Rubí Valencia, Montserrat Silva y Christian Hernández, así como Javier Mayorga, de 12, y Uriel Capó, campeón nacional sub 20, se les debió haber pagado no sólo la inscripción en el certamen nacional, sino además la alimentación y el hospedaje, como decía en la convocatoria respectiva, pero el directivo estatal sólo les entregó una cantidad en efectivo que no cubrió sus necesidades.

Javier Mayorga y Gabriel Capó expusieron que Rafael Hernández trató de justificar en diferentes ocasiones lo que había ocurrido, hasta que finalmente aceptó que había omitido atender a los competidores durante los días que permanecieron en la capital federal, donde inclusive dos días, además de no tener dinero para comprar alimentos, se les cancelaron las llaves de las habitaciones porque no se cubrió el servicio, como se les había asegurado.

Los quejosos, pese a estar indignados por la mala experiencia que vivieron los ajedrecistas, no exigieron que se aplicara ninguna sanción ejemplar para el presidente de la asociación estatal, sino que además de ofrecerles una disculpa pública, por lo menos la Federación Mexicana de la especialidad, la Confederación Deportiva Mexicana o la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte le llamen la atención para que nadie vuelva a vivir esa situación desesperante e indignante para quienes pasan horas frente a un tablero de ajedrez.

Hasta ahora, sólo el director del Instituto Hidalguense del Deporte, José Alberto Chávez, se ofreció para investigar lo que sucedió y a partir de eso tomar una posición al respecto, sobre todo porque Hernández, durante una reunión que sostuvo con las autoridades estatales y con los padres de familia, aceptó los hechos denunciados.

 
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