Califican de rotundo éxito en varias ciudades de ese país la convocatoria al boicot
El movimiento latino en Estados Unidos, "más sólido, fuerte y unido que nunca"
A la lucha de los migrantes se sumaron ciudadanos europeos y asiáticos
Tras las grandes movilizaciones en diversas ciudades estadunidenses para exigir una reforma migratoria integral, líderes de grupos de mexicanos residentes en ese país sostuvieron que el movimiento latino "está más sólido, más fuerte y más unido que nunca", por lo que rechazaron la existencia de diferencias internas. Calificaron de "rotundo éxito" la convocatoria al "boicot Un día sin inmigrantes".
El presidente de la Asociación Mundial de Mexicanos en el Exterior, Carlos Villanueva, señaló que dichas movilizaciones son un mensaje claro a Estados Unidos y su Congreso de que se necesita regularizar la situación de los siete millones de mexicanos que residen en territorio estadunidense, los cuales son apoyados por 25 millones más de connacionales que sí cuentan con documentos legales de residencia.
De acuerdo con datos de esta organización, sólo en Los Angeles, California, más de 600 organizaciones civiles, sindicales e incluso religiosas se sumaron al movimiento, entre las cuales destacaron grupos de afroestadunidenses que portaron pancartas de apoyo durante una marcha en la que se esperaba la asistencia de más de medio millón de personas. Es decir, a la lucha de inmigrantes mexicanos y latinoamericanos se sumaron ciudadanos de otras nacionalidades como europeos y asiáticos.
En declaraciones radiofónicas, dirigentes en ciudades como Los Angeles, Chicago, San Antonio, Emocalli y Phoenix, entre otras, sostuvieron que el movimiento de latinos en Estados Unidos tiende a consolidarse como una fuerza más visible e influyente, que tratará no sólo de impedir la aprobación de una ley antinmigrante que criminalice la migración, sino buscará una que reconozca plenamente las aportaciones que los migrantes hacen a la economía y sociedad estadunidenses.
Desde México
Villanueva celebró que en México, estados como Michoacán, Aguascalientes, Guerrero y Querétaro, entre otros con alto índice de expulsión de migrantes, se hayan sumado al boicot para no consumir productos de origen estadunidense.
Por su parte, el presidente y fundador del Concilio Hispano de Chicago, Luis Pelayo, aseguró que las movilizaciones en Etsados Unidos tienen como eje central la reivindicación de los derechos humanos de los trabajadores inmigrantes en el mundo.
Además, descartó riesgos de que se fracture el movimiento, ya que se encuentra "más sólido y unido que nunca, porque no hay ni puede haber ruptura alguna". Lo único que se ha presentado son algunas diferencias de opinión, pero siempre en la unidad de intereses y objetivos, señaló.
La presidenta de la Alianza por la Amistad de San Antonio, Texas, María del Carmen Buitrón, se congratuló por el bajo flujo vehicular y la ausencia casi total de clientes en centros comerciales, así como el cierre de negocios cuyos dueños son mexicanos que radican en Estados Unidos.
Lo mismo ocurrió con el coordinador general de Justicia para Inmigrantes en Phoenix, Arizona, José Alley, quien explicó que en esa entidad la convocatoria para lograr un día sin inmigrantes fue escuchada, ya que no hay gente en las calles ni en sitios públicos, mucho menos en comercios.
Sólo se verá a latinos salir de sus casas para sumarse a las diversas marchas que se efectuarán en casi 150 ciudades de Estados Unidos, señaló por la mañana de ayer el presidente de la Casa de México en Emocalli, Florida, Juan Romero, quien explicó que los simpatizantes con el movimiento no gastarían en productos de origen estadunidense.
Con ello se pretende hacer notar la relevancia que los inmigrantes de origen mexicano y latino tienen en Estados Unidos, donde representan 10 por ciento del total de la economía de esa nación.
De la redacción