La tercera versión del festival se efectuará del 28 de abril al 21 de mayo próximo
En Ollin Kan, presentes sonidos árabes, africanos y tzotziles
Los músicos que vendrán traen una fuerte carga de mestizaje, como el guaguancó, señaló José Luis Cruz
Nortec y Georgina Meneses, otros de los participantes mexicanos
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En el encuentro estará la cantante y guitarrista argelina Hasna El Becharia
Del 28 de abril al 21 de mayo se llevará a cabo la tercera edición del Festival Ollin Kan Tlalpan, que ha adquirido renombre por abrir espacios a músicos de distintas partes del mundo e inclusive de nuestro país, que por lo general no entran en el circuito comercial, como es el caso este año de Marien Hassan, de la República Arabe Saharaui Democrática, que canta sobre la lucha de su pueblo, o el rock tzotzil de Sac Tzevul.
Desde hace algunos años, a escala internacional, este tipo de festivales se han vuelto espacios importantes para dar a conocer la obra de artistas, la mayoría creadores de música mestiza. Uno de los pioneros en este circuito de festivales fue el Womad, creado por el músico inglés Peter Gabriel.
La idea de Ollin Kan, cuenta José Luis Cruz, director del festival, es "ofrecer una mirada distinta", romper con la homogeneidad cultural: "Para nosotros es muy importante que el habitante de la ciudad conozca (la diversidad musical), porque vivimos en una atmósfera en la que los medios electrónicos nos quieren meter la idea de que nada más existe una cultura, la angloestadunidense". Para no ir más lejos, sigue, en México tenemos 64 lenguas indígenas y cada una representa una concepción del universo.
Una concepción del universo que se amplía cuando entra en contacto con otra, como es el caso de los mixes en California o de los argelinos en París. La migración, pues, ha jugado un papel esencial en el mestizaje musical hoy tan en boga. Al respecto, luego de la conferencia de prensa en la que se dio a conocer Ollin Kan, José Luis Cruz dijo a La Jornada: "Los músicos que traemos tienen una fuerte carga de mestizaje": como el guaguancó, que nació en el Congo y luego viajó a Cuba para luego regresar a Africa, ya transformada.
"Los migrantes van interactuando con lo que tienen, y los hijos de ellos tienen una visión muy distinta a la que tuvieron sus padres", dijo.
"Africa es un enorme caudal de nutrientes, y nosotros también lo tenemos en nuestras costas"; ejemplo de ello es Collantes, grupo de afromexicanos de la costa oaxaqueña que "trae una fascinante danza de los diablos, que se mezcla con el mundo indígena".
José Luis Cruz anticipó que el próximo año el festival estará dedicado a las migraciones.
Musicalmente, dice, los migrantes han cautivado a quienes los reciben: "India ha reconquistado Inglaterra, y los mexicanos han reconquistado Estados Unidos".
De ahí pasó a opinar sobre las recientes semanas de multitudinarias protestas en el vecino país del norte: los mexicanos allá "nos están dando un enorme ejemplo de cómo se pueden hacer las cosas. Es maravillosa la gran sublevación: hay una conciencia del potencial que se tiene y todo mundo está gratamente sorprendido. El primero de mayo va a haber un bloqueo económico, que es lo que más les duele a los gringos, y los mexicanos de acá y de allá lo pueden hacer. Pero el gobierno de acá es anodino y no quiere mancharse las manos porque teme una reacción".
Nutrida lista de invitados
Ollin Kan presentará músicos de al menos 15 naciones, entre ellas Brasil, Argelia, Italia, Nigeria, Senegal, Irlanda y Mali, famosa en el mundo entero por su riqueza musical.
La lista de quienes se presentarán es nutrida. Por mencionar sólo algunos, estará Marien Hassan, que canta un "blues del desierto" y está profundamente comprometida con la lucha de su pueblo, el saharaui; la cantante Mayra Andrade, nacida hace 21 años en Cuba, de padres de Cabo Verde, que fusiona ritmos del archipiélago con un toque de jazz; Fiamma Fumana, grupo italiano que rescata la música tradicional de su país; Cheick Tidiane Seck, pianista de Mali que durante años trabajó con Salif Keita, y Hasna El Becharia, cantante y guitarrista argelina, de familia de músicos, que se ha enfrentado a la represora sociedad de Argelia y hoy vive en París.
De México se presentarán Nortec, Cantadores de Pirecuas, Georgina Meneses y la Banda Filarmónica de Santiago Zacatepec, Hamac Caziim y varios tríos huastecos, entre muchos otros.
Uno de los aspectos fundamentales del festival es que los propios músicos se conozcan entre sí.
El acceso a la cultura y la educación es un derecho social, dice José Luis Cruz, también director de Cultura en la delegación Tlalpan. Por ello las actividades se llevan a cabo en espacios abiertos y sólo uno tiene costo (el concierto homenaje a Salario Mínimo).
Diversos escenarios
Ollin Kan se presentará en los ocho pueblos y cinco barrios de Tlalpan, el Zócalo capitalino y explanadas de otras demarcaciones. También incluirá dos exposiciones, una dedicada a Sudáfrica y otra al estado de Guerrero.
El festival es organizado con apoyo de la delegación Tlalpan, el Gobierno del Distrito Federal, la Secretaría de Cultura del DF, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, los canales de televisión 22 y 11, el Instituto Mexicano de la Radio, Radio Educación, Tv Azteca, el Hotel Calinda y Cerveza Indio.
Más información: www.ollinkan.tlalpan.gob.mx