Usted está aquí: lunes 10 de abril de 2006 Estados Enfermeras y médicos pasantes de la UdeG trabajan en condiciones precarias

Por una beca de $1,100 al mes, atienden pacientes, hacen limpieza y hasta combaten plagas

Enfermeras y médicos pasantes de la UdeG trabajan en condiciones precarias

Exigen a autoridades un cuarto digno para dormir y mejorar apoyos; amagan con movilizaciones

NELDA JUDITH ANZAR CORRESPONSAL

Guadalajara, Jal., 9 de abril. Trabajan vestidos de bata blanca pero cobran menos que un obrero. Durante un año dejan a sus familiares para vivir en cuartuchos deteriorados. Son médicos y enfermeras pasantes, pero no sólo atienden pacientes: también hacen trabajos de plomería, reparan muros, limpian las unidades de salud y hasta combaten plagas.

Laboran las 24 horas del día, con uno solo de descanso, y solamente reciben una beca de mil 100 pesos al mes, su primer ingreso como profesionistas, pues lo arduo de su formación académica les impide tener un empleo remunerado.

Son jóvenes -hombres y mujeres- con una edad promedio de 24 años de edad que invariablemente deben aceptar un trabajo en las unidades de salud que son despreciadas por los médicos de base dada su lejanía, difícil acceso o deterioro.

Las condiciones en que laboran los estudiantes de enfermería y medicina de la Universidad de Guadalajara (UdeG) -que actualmente tiene 530 prestadores de servicio social de la Escuela de Medicina en diferentes localidades del estado, así como de Aguascalientes, Colima y San Luis Potosí- son "deplorables", denunciaron las autoridades de la casa de estudios.

Mediante un video y fotografías, el presidente del Consejo de Pasantes de la UdeG, Alfonso Farías Basulto, expuso las precarias condiciones en que viven durante un año los prestadores de servicio social.

Los jóvenes estudiantes tienen que lidiar con fauna nociva en los Centros de Salud, donde hay deficiencias tanto en las instalaciones eléctricas como de las agua potable y, por si fuera poco, son inseguras, pues no cuentan con vidrios o las chapas de los cuartos donde deben residir no tienen llave. Además los tinacos están contaminados y los servicios sanitarios descompuestos.

"No pretendemos trabajar menos. Queremos laborar mejor para la comunidad, darle un trato digno y en buenas condiciones, pero requerimos una beca mejor, ya que el sistema de salud interno lo mantenemos los médicos pasantes", enfatizó Farías Basulto.

Deben costear materiales

El representante de los pasantes agregó que, además, los prestadores de servicio social deben costear el material médico con el que laboran, reparar mobiliario y en ocasiones viajar más de siete horas por brecha para llegar al Centro de Salud que les fue asignado.

El Consejo de Pasantes exigió a las autoridades sanitarias de la entidad material suficiente para la atención de urgencias, realizar labores exclusivamente médicas, que se dé mantenimiento continuo a los Centros de Salud, medidas de seguridad en los mismos, aumento de la beca a 990 pesos quincenales, medio de transporte seguro para llegar a las comunidades y una habitación digna para pernoctar, según Farías Basurto.

En una misiva, los pasantes hicieron saber a las autoridades sanitarias del estado que están dispuestos a movilizarse si no se modifica su situación laboral.

El secretario de Salud en Jalisco, José de Jesús Becerra Soto justificó las condiciones de los Centros de Salud al señalar que la "Secretaría de Salud no nació ayer, tiene más de 60 años de existencia. Se debe de considerar entonces que también los inmuebles tienden a envejecer y definitivamente el mantenimiento se brinda, pero, como en cualquier edificio, hay que hacerlo con frecuencia".

Apuntó que los Centros de Salud incluyen un área de residencia y, en algunos casos, no son los más idóneos no sólo para trabajar, sino para vivir. Incluso manifestó que se ha presentado la necesidad de reubicar a algunos pasantes por esta razón.

Entrevistado por separado, el director de Salud Pública de la dependencia, Salvador Paredes Romero, reconoció que sí hay rezago en los Centros de Salud rurales del estado, donde más de dos mil 800 becarios entre pasantes de medicina, internistas, enfermeras, nutriólogos y trabajadores sociales, etcétera, prestan su servicio social en la Secretaría de Salud de Jalisco este momento.

"Sí tenemos rezagos, estamos conscientes que hay unidades antiguas muy importantes que requieren mantenimiento mayor, incluso infraestructura más moderna y fortalecimiento en sus operaciones", refirió.

Aseguró que la Secretaría de Salud tiene recursos para hacer las modificaciones que las unidades de atención requieren y que demandan los pasantes.

 
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