El PRI ha "sobrevendido el vuelo de las diputaciones"

Felipe Calderón: la pelea quedó ya entre AN y PRD

CLAUDIA HERRERA BELTRAN ENVIADA

Mérida, Yuc., 6 de abril. Felipe Calderón hizo sorna de Andrés Manuel López Obrador al llamarlo "gallito que andan desplumando", de "esos pescaditos, pejelagartos" que prometió echarse al plato, y en el discurso sacó al PRI de la pelea por la Presidencia de la República.

En una gira en la que escuchó reclamos de empresarios contra los "head hunters y el gabinete Montessori" del gobierno del presidente Vicente Fox, declaró que a tres meses de las elecciones la pelea presidencial quedó entre dos: el PRD y el PAN, porque los priístas "tienen sobrevendido el vuelo de sus diputaciones y no han podido ni despegar".

El mismo día en que el gobernador de Yucatán, Patricio Patrón Laviada -aliado de Calderón- era acusado ante el Instituto Federal Electoral (IFE) de haber hecho proselitismo en favor del PAN en esta entidad, el mandatario fue cuidadoso y no asistió a los actos de Calderón. Sin embargo, integrantes de su familia estuvieron en primera fila: Cecilia Laviada, madre del gobernador, y su hermano Osvaldo Patrón.

Además el panista se apoyó en la figura del mandatario. Primero en Ticul y después en Izamal lo elogió como gran constructor de carreteras, presumió de su amistad con él y auguró que harán un equipo fuerte si llega a la Presidencia de la República.

Ante unos 4 mil yucatecos que fueron transportados en decenas de camiones a Izamal, se enorgulleció de su relación con Patrón y le envió saludos por medio de la señora Laviada.

El miércoles pasado el mandatario local acudió a la ciudad de México para reunirse con empresarios y ese mismo día regresó a Yucatán. En el aeropuerto de Mérida comentó que espera el triunfo de su partido en la carrera presidencial.

"Mañana (este jueves) tenemos por acá a don Felipe y esperemos que le vaya muy bien", explicó, y luego comentó que tenía planeado conversar con él, lo que se esperaba ocurriera la noche de este jueves.

Correa Mena en la operación cicatriz

Durante su recorrido, que abarcó cuatro municipios (Tikul, Mérida, Izamal y Tizimin), el michoacano estuvo acompañado de los diputados federales y candidatos del PAN al Senado de la República Beatriz Zavala y Alfredo Rodríguez y Pacheco; de su coordinador municipal Xavier Abreu, el ex secretario de Desarrollo social de la entidad, quien fuera acusado por los seguidores de Santiago Creel de apoyar a Calderón en la elección interna con la llamada operación cochinita.

Para enviar el mensaje de una efectiva operación cicatriz en el PAN yucateco, Luis Correa Mena, antaño adversario de Calderón y quien se encargó de la campaña de Santiago Creel en la elección interna, fue nombrado coordinador de municipios de la campaña. El yucateco recientemente renunció a la candidatura a diputado federal -que fue asignada al senador Juan José Rodríguez Prats- en busca de la postulación a la gubernatura del estado.

De buen humor, el panista pronunció algunas palabras en maya y se declaró contento porque hace un mes las encuestas decían que el panista tenía diez puntos de desventaja y la semana pasada empezaron a salir otros sondeos con tendencias a su favor.

Al principio sólo citó las encuestas que lo ponen a la delantera o en empate, pero después, en Mérida, se refirió concretamente a una publicada ayer, en la cual aparece con tres puntos de desventaja. Para Calderón, los sondeos de "tirios y troyanos" demuestran una cosa: que su campaña va creciendo.

Fue entonces cuando se burló de Andrés Manuel López Obrador, al decir: "por ahí anda un gallito al que no le habían quitado ni una pluma y ya lo andan desplumando". Era clara su alusión al ex jefe de Gobierno del Distrito Federal.

Las referencias zoológicas no se detuvieron ahí. "Y a esos pescaditos, esos pejelagartos que andan por ahí, ésos, miren, me los voy a echar al plato bien fritos", exclamó, y con ello hizo recordar la moda de las "chachalacas" que impuso el tabasqueño.

Aunque López Obrador ya declaró una tregua en la descarga de descalificativos contra el Presidente de la República, el panista siguió aludiendo al momento en que López Obrador calló al mandatario, y señaló que se acabaron los tiempos en que las voces eran acalladas incluso con la muerte.

"Antes nadie podía ya no digan alzar la voz, alzar la mirada frente al presidente de la República. México era el país de un solo dueño, del señor presidente", planteó. Y aseguró que en esa época las voces que se le oponían eran acalladas incluso con la muerte. Según explicó, había un autoritarismo que aplastaba a México y a Yucatán.

En Mérida se reunió con 350 hombres de negocios, entre los que se encontraban acaudalados empresarios como José Luis Ponce García, de Coca-Cola; Gustavo Ricalde Durán, dueño de los Leones de Yucatán; Fernando Mantecón, de Cemex, y Rodrigo de la Peña, de Toyota. Ahí escuchó quejas del gobierno foxista.

Jorge Bolio, empresario del turismo, reclamó que se han nombrado secretarios del ramo "por amiguismo, por compadrazgos, por carrera política", sin importar que tengan o no experiencia. "Queremos pedirle respeto y apoyo", expresó.

José Seijoo, dueño de la cadena Seijoo, le pidió que eligiera un buen gabinete y no repitiera los errores del gobierno del presidente Vicente Fox.

Se tuvo mucha fe en el foxismo, dijo, pero recordó a los "head hunters, su proceso de elección, el gabinete Montessori, todo lo que hemos escuchado nos da la realidad de lo que no se pudo lograr, aunque haya éxitos bien recalcables, como en vivienda".

Advirtió que en esta administración privó la incomunicación, lo que inclusive propició la salida de Calderón y de Porfirio Muñoz Ledo del gabinete.

Ya antes los ganaderos le habían dicho en Tikul que la competencia de la carne importada es desleal y que los pone en seria desventaja.

En el mismo tono en que han hablado sus seguidores en desayunos de recaudación, le preguntaron cómo pretende comunicar su mensaje a la "gente de abajo", porque el sector empresarial ya está convencido.

Como lo ha dicho en otras ocasiones, prometió que no pedirá ayuda a los head hunters para elegir a su gabinete y que, sobre todo, buscará gente leal.

Reiteró su discurso de crítica al gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, al acusarlo de haber estatizado los medios de comunicación, los bancos, el sistema de salud y las escuelas.

De esa manera, Calderón continuó con la campaña panista que asocia a López Obrador con Chávez.