El Club de Periodistas homenajeó a la escritora
Libaneses propondrán a Cacho para el Premio Nobel de la Paz
La comunidad libanesa de México pedirá el Premio Nobel de La Paz para la periodista Lydia Cacho en 2007, anunció el doctor Alfredo Jalife Rahme, durante el homenaje que el Club Mexicano de Periodistas rindió ayer a la autora de Los demonios en el edén.
Cacho Ribeiro, por su parte, recordó que en la grabación de las conversaciones entre el empresario textilero Kamel Nacif y el gobernador de Puebla, Mario Marín Torres, el llamado rey de la mezclilla afirma que hostigará a la escritora "hasta que pida paz".
Pues bien, dijo Lydia Cacho, "aquí estoy pidiendo paz, pero con justicia para todas las víctimas de la pederastia y para todos los periodistas perseguidos en este país".
En el acto participaron la reportera Blanche Petrich, que ha cubierto el caso Cacho-Nacif-Marín desde el principio: el caricaturista Rafael Barajas El Fisgón, los periodistas Alvaro Delgado y Jorge Meléndez, el abogado Alvaro Arceo Corcuera y la presidenta del organismo anfitrión, Celeste Sáenz de Miera.
Jalife Rahme, presidente de la Comunidad Libanesa en México, dijo en su intervención que traía un saludo para Lydia Cacho del alcalde de Becharre, población de aquel país mediterráneo donde nació Jean Succar Kuri, el connotado pederasta cuyas espantosas "hazañas" con menores de edad en Cancún están ampliamente documentadas en Los demonios del edén, el libro de Lydia Cacho que suscitó una conspiración entre Kamel Nacif y el gobernador de Puebla para tratar de silenciarla.
El investigador universitario, que hace tres lustros documentó también el fenómeno de la explotación sexual de niños, calificó al gobierno de Vicente Fox de "narcocleptocracia" (gobierno de narcotraficantes y ladrones), cuyos intereses están "íntimamente relacionados" con la mafia internacional de los pederastas.
Abrumada por la solidaridad que ha recibido del gremio de los periodistas desde que fue detenida por el gobierno de Puebla, en diciembre, Lydia Cacho expresó que todo es "como estar en el programa reporteando por un sueño" y manifestó su deseo de ponerse a trabajar sin ser objeto ya de tantas atenciones. Sin embargo, dijo que gracias al apoyo de los medios ha podido resistir el embate que en su contra vino desde la residencia presidencial, donde la señora Marta Sahagún "me llamó para advertirme que no mencionará los vínculos de Kamel Nacif con la fundación Vamos México", aserto que cuando fue publicado, semanas atrás, la esposa de Vicente Fox se apresuró a desmentir, "sin que nadie se lo creyera", precisó ayer la periodista.
Entre el público se encontraba Rosario Ibarra de Piedra, que al ser mencionada por el maestro de ceremonias como la mujer que encabeza la lista de candidaturas del Partido de la Revolución Democrática al Senado de la República fue objeto de un caluroso aplauso.