Mueren más indocumentados mientras en EU discuten altura de vallas en la frontera
Resurge amenaza de los minuteman
Washington, 22 de marzo. El gobierno estadunidense ha anunciado que destinará millones de dólares para construir "murallas virtuales" y cárceles reales para frenar el flujo migratorio, mientras el presidente George W. Bush insiste en que busca una forma más "humanitaria" para abordar la crisis de los indocumentados.
Eso encapsula el actual debate sobre migración, empantanado entre medidas cuasi militares y la realidad: este país depende de la explotación de mano de obra extranjera. Según algunos, los migrantes son una grave "amenaza"; para otros son parte necesaria del futuro de Estados Unidos.
Los políticos debaten en Washington y alrededor del país sobre qué tan largos y altos deben ser los muros fronterizos; si duplicar el número de agentes de la Patrulla Fronteriza (por ahora, el Comité Judicial del Senado propone unos 10 mil más en los próximos cinco años), cuántos kilómetros de barreras (la propuesta aprobada por ahora en el Senado son casi 300 kilómetros más, sólo en Arizona) y cuántos indocumentados podrían ser beneficiados si les otorgan el derecho legal a ser explotados.
Bush sigue promoviendo su visión de una reforma migratoria limitada, y esta semana ha reiterado la necesidad de abordar tanto el asunto de seguridad fronteriza como el de crear un programa de trabajadores huéspedes. Pero no ha logrado imponer su voluntad a su propio partido, profundamente dividido sobre el tema. En gran medida, esto es resultado de su debilidad política a causa del desplome del apoyo popular a su presidencia y su política bélica.
Mientras eso ocurre en Washington, más migrantes mueren, lo que aumenta la lista de los 3 mil 600 registrados oficialmente por el gobierno mexicano desde 1995. Hace unos días, una niña de 12 años fue atropellada en Arizona por un vehículo de la Patrulla Fronteriza junto con su padre, quien sobrevivió y fue testigo de la muerte de la pequeña; el hombre está encarcelado y a punto de ser deportado a México. Aunque fue un accidente causado por las autoridades estadunidenses, el padre fue detenido por poner en peligro a su hija al atreverse a llevarla por el desierto; un fiscal rehusó proceder en su contra, y pronto será deportado.
Cárceles familiares y muros "inteligentes"
Tras reconocer que el ingreso de padres e hijos representa un desafío especial para las autoridades, Michael Chertoff, secretario del Departamento de Seguridad Interna, anunció la solución del gobierno estadunidense. "Hasta ahora, no hemos tenido la habilidad para detener a familias que cruzan como grupo porque no tenemos la capacidad de mantenerlas juntas en un centro de detención", señaló Chertoff el lunes. "Vamos a abordar eso al abrir, a principios de mayo, un centro de detención enfocado en la familia, para que ahora podamos detener a las que cruzan ilegalmente". Es, insistió, una medida "humanitaria", ya que "queremos disuadirlos de que traigan a niños en lo que es un viaje muy peligroso a través de la frontera a Estados Unidos".
Chertoff no habló de edificar una barrera de concreto a lo largo de la frontera, como algunos legisladores han propuesto. "Vamos a construirnos una barda virtual; no una barda de ladrillos y cemento, con almbre de púas, la cual, les digo, simplemente no funciona, ya que la gente se trepa en ella; propongo una barda inteligente", con tecnología de punta.
Más debate en el Congreso y en las calles
La negociación política de la reforma migratoria se retomará el 27 de marzo, cuando el Senado reinicie sus tareas, luego de un receso de una semana. También lo harán organizaciones tanto pro inmigrantes como antimigrantes que han librado campañas mediáticas, movilizaciones, cabildeo de políticos para promover sus posiciones.
Los minuteman regresarán en abril a patrullar la frontera sur, y según informaron medios de Arizona, son los responsables de provocar el debate nacional y el enfoque sobre el fracaso del gobierno federal en controlar sus límites con México. Su líder, Chris Simcox, declaró a la agencia Ap: "si el Senado no aprueba una ley de seguridad fronteriza, pronto verán duplicarse nuestras filas a finales de septiembre".