Analizan las causas de la escasez de trufas en Francia
Niza, 22 de marzo. El beneficio de los productores de trufas fue muy modesto durante su encuentro de la semana pasada en la localidad de Lalbenque, en el sur de Francia: sólo consiguieron vender 13 kilos del hongo que crece bajo tierra, mientras hace un año fue más del doble. Como es de esperar, el precio aumentó de forma considerable, ya que se pagaron entre 850 y mil 200 dólares por kilogramo del tuber melasporum, delicatessen amada por los gourmets. Entre los productores el ánimo está por los suelos, pues cada vez encuentran menos ejemplares de la aromática "diva de vestido negro". Por ello, agricultores de Francia, Italia, España y Hungría se reunieron el fin de semana en Niza, en la Costa Azul, para buscar una solución a la escasez. Ahora esperan que los científicos puedan ayudar a develar los secretos de las misteriosas trufas para saber cómo actuar. "No hay ninguna otra cosa en la agricultura de la que la ciencia sepa tan poco como de las trufas", afirmó en Niza Jean-Charles Savignac, presidente de la federación de productores de trufas franceses. "Antes, los bosques estaban más cuidados; entonces había una cosecha enorme y no necesitábamos ayuda", explica. Pero eso es parte del pasado. En un siglo la cosecha se redujo de mil toneladas a 435, y en los años recientes ya es de menos de 100 toneladas.