La educación debe impulsar la paz, tolerancia y comprensión, sostiene
UNESCO: cuanto más se interactúa, menos se comparte, paradoja de la globalización
El rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, recibió la medalla de la organización
El director general de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Koïchiro Matsuura, afirmó que el proceso de globalización implica una paradoja: mientras más interactuamos menos compartimos, por lo que uno de los retos es cultivar el diálogo entre las civilizaciones, como quedó de manifiesto después de los ataques del 11 de septiembre.
Ese acontecimiento, dijo, expuso la urgencia de encontrar caminos que conduzcan a mejorar la comprensión mutua entre pueblos, culturas y religiones, y debilitar el impulso de involucrarse en el terrorismo. La diversidad cultural es en donde se debe aprender el reto de convivencia en estos tiempos turbulentos, insistió.
Por esta razón, destacó, la educación está llamada a desempeñar un papel relevante en los temas de la diversidad cultural. Debe eliminar los estereotipos culturales, fomentar el diálogo y promover la paz, la tolerancia y la comprensión.
En este contexto, manifestó que existe una necesidad de revisar los contenidos y programas curriculares de estudio para analizar si son adecuados a la tarea de abordar el mundo tal y como es y cómo será en el futuro.
En una conferencia magistral que ofreció ante el cuerpo directivo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que reconoció como una de las 100 mejores y más importantes del mundo, Matsuura apuntó que, en ocasiones, las universidades han sido "un oasis aislado en el desierto de reflexión y de uniformidad".
Sin embargo, agregó, está llamada a comprometerse con la sociedad y a ser un reflejo de ésta. De alguna forma se espera que esté apartada para tener la distancia necesaria para la reflexión serena e independiente.
Al proporcionar un espacio para discutir los temas de la diversidad cultural, las universidades pueden desempeñar un papel constructivo, destacó. En este sentido, dijo que la universalización del saber, que subyace en la idea de la diversidad, debe abarcar la pluralidad del conocimiento.
Lo anterior impone ciertas demandas y responsabilidades para la participación de la universidad en los debates contemporáneos. También existe la necesidad de observar cómo se trata a los diferentes grupos, entre ellos, a las minorías culturales y a las comunidades autóctonas.
En última instancia, la clave no es tan sólo aprender los principios de la educación intelectual sino aplicarlos, finalizó.
El rector Juan Ramón de la Fuente entregó al representante de la UNESCO la medalla de oro conmemorativa de los 450 años de la institución y, a su vez, Matsuura dio a De la Fuente la medalla UNESCO, elaborada en madera.
Por su parte, el titular de Educación Pública, Reyes Tamez Guerra, manifestó el respaldo de la secretaría que encabeza para que Ciudad Universitaria sea considerada por la UNESCO patrimonio cultural de la humanidad y confió en que esta iniciativa tenga éxito "muy pronto".