No es posible que gente de EU venga a poner bombas a Bolivia, dice Evo Morales

Atentados en dos hoteles en el centro de La Paz; dos muertos y 7 heridos

Detiene la unidad de elite antiterrorista boliviana a un estadunidense y una uruguaya

ROSA ROJAS CORRESPONSAL

La Paz, 22 de marzo. Fuertes explosiones en dos hoteles ubicados en el centro de la ciudad causaron dos muertos, siete heridos y fuertes daños materiales. Pocas horas después de los atentados la Policía Nacional detuvo a un hombre de nacionalidad estadunidense y a una mujer uruguaya como presuntos responsables de estos hechos que el presidente Evo Morales, que hoy cumple dos meses en el poder, calificó de "provocación a la democracia", cuestionando si existe un posible involucramiento del gobierno de Estados Unidos en ellos.

El general Isaac Pimentel, comandante general de la Policía Nacional, mencionó entre los posibles móviles de estos atentados "motivos religiosos", aunque sin descartar que pudieran ser políticos.

Indicó además que entre los documentos incautados a la pareja detenida, se encontró una anotación en el sentido de que se planeaba realizar un ataque con explosivos en el Consulado de Chile el sábado 25 de marzo, "seguramente este atentado nos iba a acarrear algunos problemas como país pero gracias al trabajo del equipo antiterrorista y la policía técnica judicial estamos evitando que se consuman estos hechos terroristas", dijo.

El estadunidense Lestat Claudius de Orleans es "un experto en manejo de explosivos y "parece disponer de documentos y pasaportes con su nombre pero con nacionalidades cambiadas". Maneja tres nombres en sus diversas actividades en Argentina y Bolivia. En el hotel Linares, uno de los afectados, donde ocurrieron los dos decesos, se registró como ciudadano saudita, informó Pimentel.

En junio de 2005 Lestat Claudius fue detenido en Argentina bajo el cargo de "actos terroristas" cometidos contra un cajero automático, si bien fue liberado en diciembre de 2005. Previamente, en mayo de ese año, ingresó a Bolivia, adquirió cartuchos de dinamita en Potosí, se trasladó a Sucre y desde ahí envió por correo un paquete con ocho cartuchos de dinamita a un juez argentino, junto con una carta amenazadora. El paquete fue interceptado por las Fuerzas Especiales de Lucha contra el Narcotráfico, agregó el general.

Más aún, relató, en marzo de 2006, el presunto terrorista, junto con su conviviente, Alba Ribeiro Acosta, viajó a la ciudad de Copacabana en un taxi, dirigiéndose a la frontera Perú-Bolivia, "haciendo explotar una carga de dinamita junto al arco fronterizo", sin que se conozcan los motivos que los condujeron a esta acción.

¿"Qué está pasando"?

Al referirse a los atentados dinamiteros durante un acto en la ciudad de Santa Cruz, en el que echó a andar una campaña de credencialización para entregar documentos de identificación a ciudadanos, el presidente Morales Aima comentó: "El gobierno de Estados Unidos lucha contra el terrorismo, y no es posible (que) gente de Estados Unidos venga a meter bombas a los hoteles; ¿hay una lucha contra el terrorismo del gobierno de Estados Unidos, o nos mandan estadunidenses a hacer terrorismo en Bolivia? ¿Qué está pasando?"

Consideró los atentados como provocación a su gobierno y a la Asamblea Constituyente, con la que llegará "el verdadero cambio", por lo que, dijo, "algunos grupos de poder, algunos terratenientes, algunos empresarios que no practican solidaridad van a ser afectados en sus intereses, detrás de estos dos atentados están algunos grupos oligárquicos en Bolivia usando agentes externos para amedrentar, para crear zozobra, para decir que el gobierno de Evo Morales no sabe controlar Bolivia".

Pidió a la comunidad internacional "condenar esta clase de actos que vienen del exterior para provocar a la democracia..."

"He escuchado decir que serían algunos loquitos norteamericanos, ¿qué locos? ¿qué perversos? ¿acaso son tan tontos los norteamericanos? pero lo que yo veo, ahora, son estadunidenses, terroristas que quieren amedrentar. Y pido al gobierno de Estados Unidos, públicamente, que no vengan terroristas a Bolivia a matar inocentes, a atentar en los hoteles", agregó el mandatario.

En la conferencia de prensa, el general Pimentel refirió que luego del atentado en el hotel Linares, al realizar investigaciones, elementos de la unidad de elite antiterrorista ingresaron al hotel Riosinho, mismo que procedieron a desalojar al percatarse de que en una de las habitaciones había humo, acción que permitió salvar 19 vidas.

Recientemente la unidad de elite antiterrorista fue descertificada por militares estadunidenses, en un incidente que aún no finaliza, ya que al serle requerido al gobierno boliviano por parte del jefe del grupo militar de Estados Unidos que opera en el país, la devolución de las armas que le habían entregado, el gobierno del presidente Morales exigió que esta petición fuera realizada por los debidos conductos diplomáticos. El desacuerdo se desató al haber sido cambiado el jefe militar de dicho grupo y haber designado a uno nuevo. Morales aseveró que ningún comandante sería relevado por presiones externas.

Más adelante, el general Pimentel refirió que al filo de las 2:45 horas de este miércoles fueron detenidos Lestat Claudius y Alba Ribeiro en un hotel de la ciudad de El Alto, quienes fueron conducidos en calidad de detenidos a la Policía Técnica Judicial. "El primero de los nombrados no negó la autoría ni la participación en estos hechos", aseveró.

Comentó que pese a que "los autores se encuentran totalmente identificados y a disposición de las autoridades", la Policía Nacional considera necesario seguir una investigación especializada sobre los probables vínculos que pudieran tener los acusados a nivel nacional e internacional. "No descartamos que los móviles de este atentado sean religiosos, ya que este señor es conocido como sacerdote y practicante de ritos paganos...", apuntó.

Motín en penal de máxima seguridad

Por su parte el fiscal distrital de La Paz, Jorge Gutiérrez, indicó que va a pedir la detención de Lestat Claudius en el penal de máxima seguridad de San Pedro Chonchocoro, a 18 kilómetros de esta capital, y que este día fue escenario de un motín.

Los 127 reclusos de esa prisión protestaron por la falta de agua corriente derivada de un desperfecto que debe arreglar de la empresa local Aguas del Illimani, filial de la francesa Suez.

La policía empleó gas lacrimógeno para contener el motín, donde la situación era esta noche de "relativa calma pero muy tensa", según dijo el gobernador de El Alto, Félix Solíz.

Los detenidos por los atentados fueron presentados a la prensa pero no se permidió que hicieran ninguna declaración pública por estar el caso en etapa de investigación.

Los reporteros cuestionaron al general Pimentel la veracidad de la información de que los acusados tenían permiso de la policía de la ciudad de Villazón para comercializar explosivos; contestó que se tienen documentos de que efectivamente tienen una empresa que se dedica al comercio de esos explosivos, y se requiere verificar la autenticidad de éstos. "Estamos trabajando para reunir mayor evidencia, en coordinación con los departamentos de inteligencia de diferentes países, incluido Estados Unidos, para recabar la información sobre este ciudadano estadunidense".

El general confirmó que Lestat llevaba anotaciones en un diario, mismo que ya se traduce del inglés al español para utilzarlo en la investigación.

Finalmente, el coronel Rey Torres, técnico en explosivos, comandante de Bomberos de El Alto, informó que los detenidos usaron en los atentados dinamita con mecha lenta y accionada por un detonador. Se estima que utilizaron unos 15 kilos de dinamita, alrededor de 128 cartuchos del explosivo en cada atentado. "Por el explosivo que han usado y el lugar donde lo han colocado se presume que tienen conocimiento del uso de explosivos. Se les han incautado 100 metros de mecha lenta, se presume que usaron todos los cartuchos de dinamita que estaban en su poder en los atentados", comentó.