Poco efectivas, medidas para combatirlos, dice relatora
Crecen discriminación y racismo en el orbe: expertos
Alarmante, su propagación en el deporte, señalan
Ginebra, 21 de marzo. El lenguaje racista, propio de los grupos políticos de extrema derecha, está siendo asimilado en las prácticas e ideologías de la democracia, advirtió hoy el relator especial sobre las formas contemporáneas de este problema, Doudou Diodé, con ocasión del Día Internacional para la Eliminación de la Discriminación Racial.
Citó los ejemplos de Dinamarca y Suiza, donde la violencia racial se intensifica en la vida cotidiana, al grado de ser tolerada como normal. Resaltó que en ámbitos como el deportivo, el racismo está cobrando un tono alarmante y violento, lo que demuestra que no se presenta únicamente por cuestiones políticas o religiosas.
Pese a los esfuerzos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y de la comunidad internacional para eliminar el racismo y la discriminación, como quedó plasmados en la Conferencia Mundial de Durbán contra el Racismo en 2001, nuevos instrumentos de propagación de odio y desprecio étnico han surgido en el mundo.
Tales métodos, como se sabe, se desarrollan especialmente en Internet y la telefonía celular, pues en vez de estimular la tolerancia y la educación multicultural sirven de medio para intensificar el odio, la xenofobia y la intolerancia.
En Nueva York, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, instó a combatir la tolerancia de la rutina racista. No es, dijo, un atributo lamentable de la naturaleza humana porque "nadie nace para odiar; la intolerancia se enseña y, por lo tanto, puede ser revocada".
El enfoque de esta conmemoración es "Luchar contra la discriminación diaria en la familia, escuela, lugar de trabajo, centro de recreo o descanso". Tiene como razón de ser que el racismo cotidiano es desapercibido por la sociedad, aun sin olvidar que las mayores atrocidades de la humanidad han sido cometidas por causas raciales.
La socialización del racismo y de la discriminación étnica se revela este año como una práctica sutil, viciosa e insidiosa, lo cual obstaculiza los numerosos esfuerzos de la comunidad internacional para la creación de sociedades tolerantes, expresó la alta comisionada para los Derechos Humanos, Louise Arbour.
Durante una mesa redonda en el Palacio de las Naciones, la funcionaria añadió que las medidas para el combate del racismo se muestran poco efectivas; las legislaciones, políticas y programas no han logrado un progreso significativo para la erradicación de estos problemas.
El Día Internacional para la Eliminación de la Discriminación Racial se instituyó en la ONU en 1965 para recordar la tragedia de Sharpeville, en Sudáfrica, cuando el 21 de marzo de 1960 la policía abrió fuego sobre manifestantes que, en forma pacífica, se oponían a las leyes racistas del apartheid, cuyo resultado fue de 69 participantes muertos y decenas de heridos.