Vicente Fox escuchó imperturbable en San Lázaro
Estado laico, el más grande aporte de Juárez: diputados
El PAN así lo reconoce, afirma el senador Héctor Larios
A contracorriente de la evidente oposición de Vicente Fox y su gobierno a conmemorar el bicentenario de Benito Juárez, por vez primera en la historia posrevolucionaria se le reconoció al indio zapoteco con una sesión solemne en el Congreso general, en la que estuvieron presentes los titulares de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial para enaltecer los grandes aportes del Benemérito a la historia nacional, uno principalísimo la conformación del Estado laico.
En el salón de sesiones de la Cámara de Diputados, el Presidente de la República, quien desalojó de Los Pinos el cuadro de Benito Juárez, pintado por Tiburcio Sánchez en 1889, escuchó imperturbable a todas las fuerzas políticas, incluida la panista, que reconocieron el valor intrínseco del oaxaqueño en el desarrollo del país.
El acto solemne, convocado por la Cámara de Diputados, conjuntó a los representantes de dos poderes de la Unión: Marcela González Salas, presidenta del órgano camaral y legisladora perredista; Vicente Fox, titular en turno del Ejecutivo, y Enrique Jackson, priísta y titular del Senado.
Fox ocupó el sitio asignado por los legisladores a su investidura, debajo de las letras de oro en el muro principal del salón de sesiones, donde destaca el apotegma fundamental del juarismo: ''Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz''. Al frente, entre las curules, un diputado oaxaqueño del PRI comentaba: ''Tantos problemas que este hombre ha provocado con otros países, y tenemos el infortunio de verlo sentado ahí''.
Tema incómodo
En ese escenario, el coordinador parlamentario del PRI, Emilio Chuayffet, conocedor de la obra juarista, colocó en el centro de la ceremonia el tema del Estado laico, dada la proclividad de Fox a acercarse en actos públicos a la Iglesia católica: ''La ley del 4 de diciembre de 1860 irrumpe en la novedad: postula la libertad de creencias, culminación de nuestro proceso liberal, invirtiendo ahora los términos del discurso político, para decir que lo herético es querer obligar a alguien a compartir la búsqueda del absoluto en el que cada quien pueda creer; seculariza la sociedad y llega así a una solución mexicana: la Iglesia está siempre sujeta al Estado, en todos aquellos actos que tengan efecto en la sociedad civil, con arreglo a la teoría de la soberanía; el Estado se seculariza y no interfiere en las actividades estrictamente religiosas, con arreglo a las libertades de culto y de creencia. Desde entonces en México, y no es opcional, ni Iglesia con poder político ni injerencia estatal en la fe''.
Para acercar públicamente a la figura de Juárez los principios que rigen al PAN, el senador Héctor Larios reconoció al prócer oaxaqueño como el protagonista más reconocido de la historia de los mexicanos. Mientras esto decía, desde su sitio en la mesa directiva Vicente Fox se mantenía en actitud ausente. Su correligionario siguió frente al micrófono y fustigó a quienes reviven la ideología de las personas históricas para sacar provecho. La alocución del panista redundó en reconocer, también, el rescate de la soberanía nacional, la separación de la Iglesia y el Estado, la organización de la República bajo los principios de igualdad de los mexicanos, la democracia, la división de poderes y la construcción de instituciones, a la actuación política e histórica de Juárez.
Entonces puso énfasis en el tema del Estado laico: ''Acción Nacional reconoce y siempre ha reconocido como una de las principales aportaciones de Juárez a nuestra patria el Estado laico. Sin libertad, los valores humanos se asfixian y perecen; ofende a la dignidad de las personas que se pretenda desde el Estado imponer formas de pensamiento o de conducta personal. Cómo no estaría a favor de un Estado laico un partido que ha vivido y proclamado la primacía de la persona humana, que ha luchado porque no tenga cortapisas el ejercicio de su libertad, sin más limites que el derecho de los demás''.
Para el senador Larios, Benito Juárez estuvo lejos de concebir el Estado laico como un Estado que combate a las iglesias y las religiones; por el contrario, es la única garantía de libertad de cultos y libertad religiosa. ''El mayor homenaje que podemos rendirle todos es continuar con el mismo tesón en cumplir lo que aún falta de su ideario en términos del fortalecimiento de la República, de equilibrio y respeto entre poderes e instituciones y poderes, de combate a la corrupción, de garantía a los derechos humanos, de conjugar libertad y justicia en el marco de la democracia y, sobre todo, de fortalecer la unidad de los mexicanos''.
Más adelante, Jesús Martínez Alvarez, líder de la bancada de Convergencia, emitió un mensaje político porque en México son tiempos difíciles, no sólo por el sexenio que termina y la inquietud que propicia el proceso electoral, sino por las acechanzas de una modernidad mal entendida, según la cual no es más que desarrollo subordinado, es decir, subdesarrollo para las clases mayoritarias y enriquecimiento desmedido para unos cuantos.
Por su parte, el vicecoordinador del grupo parlamentario del PT, Pedro Vázquez, dijo: ''Benito Juárez vive en Palacio Nacional, vive en todo el país y en todo el mundo donde haya hombres y mujeres ansiosos de mantener su libertad. Juárez es mucho más que un cuadro al que el habitante en turno de Los Pinos puede quitar de la pared, como sin con esto se le borrara de la historia.''
La participación del senador priísta Sadot Sánchez Carreño, presidente de la comisión bicamaral para los festejos del bicentenario, no estaba considerada en el programa original, pero su compañero Enrique Jackson le cedió su turno. Este último se inconformó aún más cuando, desde su curul, Pablo Gómez le gritó a Marcela González Salas: ''Pero éste no es de aquí''.
Al concluir la ceremonia, la diputada González Salas señaló que la memoria viva de Benito Juárez García ''nos convoca, nos exige, por el bien de nuestro pueblo, revivir el sueño y los principios del presidente Juárez, restaurar una República independiente, libre de subordinaciones, restaurar una República igualitaria, libre de privilegios para unos cuantos''.