Asegura el mandatario que las mujeres van a construir y transformar este país
Reconoce el Presidente que hay muchos faltantes y pobreza en Valle de Chalco
Ampliar la imagen El presidente Vicente Fox Quesada y su esposa acudieron a la misa dominical en la catedral de Valle de Chalco Foto: Mario Antonio Núñez
Valle de Chalco, Mex., 19 de marzo. El presidente Vicente Fox vino a Valle de Chalco a "acercarse" a la gente pobre de este municipio, que en su momento fue el modelo salinista de la solidaridad. Después de saludar, junto con su esposa, a los niños cantores del Valle de Chalco, quienes participaron en la misa dominical en la catedral de este municipio, Fox se comprometió a trabajar "duro" en lo que le resta de su mandato para combatir la pobreza y necesidades de agua potable, servicios, educación y salud de los habitantes de este lugar.
Posteriormente, en la Villa de los Niños -complejo en el que viven y estudian más de 4 mil niñas y jóvenes que cursan secundaria y bachillerato técnico con el apoyo de organizaciones privadas, gubernamentales y empresas nacionales y extranjeras-, el jefe del Ejecutivo federal aprovechó para afirmar que son "las mujeres las que van a conducir y transformar este país".
Fox Quesada asistió a la misa dominical de mediodía a invitación del obispo de Valle de Chalco, Luis Artemio Flores Calzada, quien durante su homilía indicó que la presencia de Fox y de su esposa Marta Sahagún "es regalo de Dios". Además oró por el bien del funcionario y también en memoria de los 13 jóvenes de Ecatepec que fallecieron en un accidente automovilístico el pasado viernes.
Casi al término de la misa, cuando el monaguillo se le acercó a la pareja presidencial para pedirles limosna, Fox se dio cuenta que no llevaba dinero y discretamente se lo comentó a Marta Sahagún, quien discretamente sacó de su bolsillo del pantalón de mezclilla un billete de 100 pesos, se lo dio a su marido, quien fue el que depositó el dinero en la canastilla.
Cuando terminó la ceremonia, los visitantes se acercaron hacia donde estaban los niños del coro del Valle de Chalco, quienes habían amenizado la ceremonia. En ese momento los informadores se le acercaron y Fox Quesada señaló que agradecía la invitación del obispo; añadió que se llevaba "muchos compromisos, porque veo muchos faltantes aquí, como pavimentación".
Adelantó que se va a "asegurar" de que el Seguro Popular tenga cobertura total en este municipio de más de 660 mil habitantes, que recibió su primer impulso económico y social bajo la presidencia de Carlos Salinas de Gortari. Además, dijo que se instalará en las 122 escuelas de este municipio el programa Enciclomedia, para que "estos chiquillos tengan una mejor esperanza para el futuro"
Posteriormente se dirigió a la Villa de los Niños, que se ubica en el kilómetro 2 de la carretera Chalco-Mixquic, en donde tuvo un encuentro con las más de 4 mil 200 niñas y jóvenes de bajos recursos que viven y estudian en este enorme complejo, gracias al apoyo de diversas instituciones.
En el gimnasio, Fox y su esposa escucharon varias canciones del coro de la institución, y después, ante las niñas que abarrotaron el lugar, les dijo que era un privilegio estar con jóvenes que han sacrificado a sus familias para recibir educación en este lugar y tener así una mejor expectativa de vida.
Ahí les dijo que serán las mujeres las que transformarán a México.
Previamente había dicho que él "todavía no se va", y que pese al enorme esfuerzo que puso en su tarea durante su gestión, persiste en el país mucha pobreza, la cual se comprometió a combatir hasta el fin de su sexenio. Dijo también que cuenta para ello "con el apoyo de la señora Marta y de 100 millones de mexicanos".
Cuando se dirigía del gimnasio a otras instalaciones de la Villa de los Niños, el jefe del Ejecutivo federal fue nuevamente entrevistado y repitió su compromiso de mejorar la salud y educación de los habitantes del Valle de Chalco y de Chalco.
Cuando se le cuestionó que en su intervención ante las niñas había comentado que seguirá trabajando hasta el último día de su mandato, Fox respondió: "no es despedida, al revés, es motivación por lo mucho que falta por hacer".
Al término de la visita al lugar, el Presidente fue invitado a comer algunos platillos típicos de la comida coreana -uno de los principales donadores de este proyecto es una compañía electrónica de ese país-, en compañía de la directora Margery, del obispo de Valle de Chalco y del presidente de la referida empresa en México.