Pescadores piden retirar concesión a inmobiliaria
Ignora Semarnat denuncia por daños ambientales en Zihuatanejo
Pese a ser la principal acusada por lancheros, pescadores y organizaciones como responsable de renovar los permisos a la inmobiliaria Punta del Mar que ha construido un polo turístico en la Bahía de Zihuatanejo con fuertes impactos negativos para la vida de los pobladores y su entorno, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) -al igual que otros cinco demandados, entre ellos el gobierno estatal- no se presentó ayer a la audiencia pública del caso en el Tribunal Latinoamericano del Agua (TLA) y ni siquiera envió una respuesta a sus denunciantes.
Luis Arturo Macías, del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, una de las partes demandantes, exhortó a la Semarnat a no refugiarse en el silencio "como si fuera su mejor arma". Esa dependencia, añadió, es la que tendría que haber dado una respuesta clara a esta problemática, puesto que ha reconocido que deben modificarse las condiciones en que se otorgan los permisos para este proyecto.
En el tercer día de sesiones del TLA, con sede en el ex templo de Corpus Christi, fue expuesto el caso de contaminación, vulneración costera y marina en la Bahía de Zihuatanejo, Guerrero. La denuncia fue presentada por la Red de Organizaciones no Gubernamentales Ambientalistas de Zihuatanejo, pescadores, lancheros, pequeños comerciantes y el citado centro de derechos humanos.
Luis Arturo Macías explicó que desde los años 70, década en que se impulsó la zona como un polo turístico, se originó una serie de problemas a raíz del incumplimiento para indemnizar a los ejidatarios, fomentar una urbanización que beneficiara a todos los pobladores -hay zonas que todavía no cuentan con agua potable- e impulsar un desarrollo sustentable.
En este contexto se inscribe el incumplimiento de las obligaciones del Estado al anteponer los intereses de las empresas turísticas a los habitantes de la bahía. Este es el caso del proyecto turístico Puerto Mío, impulsado por la inmobiliaria Punta del Mar desde mediados de los años 80 y que incluye un desarrollo hasta con una marina de cruceros y un muelle propio, que incrementa el objetivo privatizador de la zona, pues ahora los pobladores ya ni siquiera tienen libre tránsito, advirtió.
Con esta concepción y sin tomar en cuenta a la comunidad, esta empresa ha construido sin autorización hasta una gasolinera, un muro y un estacionamiento en la playa El Almacén, que ha sido destruida por la movilización de arenas y los rellenos realizados por esta empresa, agregó.
En cuanto a la gasolinera, destacó que el hecho de que las embarcaciones carguen combustible de forma directa y sin ningún tipo de medida de seguridad ha dañado la calidad del agua, por los hidrocarburos que se vierten en el mar, además de que se pone en riesgo los recursos naturales.
La citada empresa también construyó un rompe olas de estructura piramidal que ha ocasionado el estancamiento de las aguas residuales y la sedimentación, lo que ha traído como efecto la pérdida de cinco metros de profundidad de la laguna de Las Salinas.
Dicha laguna es la más contaminada. Hoy día, dijo, tiene un olor pestilente y una coloración turbia. Además, se han dinamitado algunos de los cerros que rodean la bahía.
A lo anterior se suma el deficiente tratamiento de las aguas residuales vertidas directamente a la bahía por parte de cinco plantas operadas por la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Zihuatanejo (CAPAZ), de acuerdo con los denunciantes.
De los ocho demandados -La Comisión Nacional del Agua, la CAPAZ, la Semarnat, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, el Instituto Nacional de Ecología (INE), los gobiernos municipal, estatal y la inmobiliaria Punta del Mar- sólo dos presentaron una respuesta en la audiencia: el INE y la CAPAZ. El primero indicó que el expediente del caso fue remitido a la dirección de Impacto y Riesgo Ambiental de la Semarnat, mientras que la comisión negó que las plantas de tratamiento a su cargo viertan aguas residuales sin tratar.