"Pensé que era un masajista"

En la madrugada del 23 de abril de 2005, una niña de 16 años relató ante un agente del Ministerio Público cómo fue que vio por primera vez a Gámez Martínez: "Subí unas escaleras y estaba abierta la puerta del primer cuarto. Caminé por un pasillo y al ver la puerta vi hacia adentro, donde estaba un señor pelón, de ojos claros y güero, sentado en un sillón. A su lado había varias niñas o jovencitas como de mi edad. Unas estaban recargadas en él y otras sentadas a su lado.

"En el otro cuarto (del edificio de la colonia Doctores) había un hombre alto, güero, no me acuerdo cómo estaba vestido, pero en el cuarto había aceites y una cama como de consultorio, que hasta arriba tenía un hoyo. Pensé que era un masajista".

Ese misma noche, una adolescente de 17 años describió la forma en que mantuvo relaciones con el líder sindical: "Metió su mano izquierda dentro de mi bata. Me tocó los senos en forma de caricia, me dijo que estaba muy bonita y luego me besó en la boca. Se desvistió, me recostó en la cama y me practicó el sexo oral. Después me penetró vía vaginal. El estaba arriba de mí. Una vez que eyaculó en mí otra chava le limpió el pene y yo me levanté de la cama y me vestí. El señor Ramón sacó de su bolsa del pantalón unos billetes y me los entregó en las manos".