Atribuye su cese al destape de esa situación
Malos manejos en la Universidad Obrera, denuncia el ex director
Darío Rojas Macías, quien fue destituido el viernes de su cargo como director de la Universidad Obrera de México (UOM) Vicente Lombardo Toledano por la hija del fundador de esta institución, Adriana Lombardo, sostuvo que su "pecado fue haber detectado un fraude de cerca de 5 millones de pesos e incomodar con su línea crítica la política laboral y postura ideológica".
En entrevista con La Jornada, Rojas Macías, quien asumió la dirección de la UOM el 24 de noviembre de 2004, precisó que en auditorías que encargó al contador público Sergio Gaitardo, tan sólo entre 2003 y 2004 encontró un faltante de "casi 2 millones", y abundó que en total, desde 1999 a 2004, son casi 5 millones de pesos los que carecen de respaldo de facturas. Mencionó también que detectó la existencia de "aviadores conocidos de los Lombardo, y una cuenta bancaria paralela con recursos de la universidad, sin supervisión de nadie".
El ahora ex directivo refirió que "la corrupción puede ser aún mayor", pues Lombardo, en conjunto con Luis Monter, quien se ostenta como apoderado y comisario de la UOM, y Amanda Fernández, "obstaculizaron" sus acciones y no permitieron que se concluyeran las auditorías, y agregó que las "anomalías" no terminan allí, pues algunas de las personas cercanas a Adriana Lombardo, presidenta vitalicia de la asociación civil que rige la universidad, "se han subido los sueldos arbitrariamente, en porcentajes que van desde 35 a 50 por ciento".
Consideró que esta situación pone en serio riesgo a la UOM, ya que desde hace algún tiempo la Secretaría de Educación Pública (SEP) pretende quitar el subsidio que le da anualmente, que asciende en promedio a "8 millones 500 mil pesos, y esta podría ser una contundente excusa para hacerlo, ya que si es grave desviar recursos privados (los que obtiene la UOM por los cursos y demás acciones que realiza), más aún lo es hacerlo con recursos públicos".
Sobre esto, Eduardo Miranda Esquivel, asesor jurídico de la UOM, precisó que lo principal es que se establezca algún mecanismo de control que vigile y supervise el buen manejo de la universidad, y señaló que el problema radica también en que existe un grupo que la ve como una "institución privada de carácter familiar" y se olvida el fundamento que le dio vida y que la hace "única en su tipo", esto es, "educar y difundir los derechos de los trabajadores".
El también presidente de la Unión de Juristas de México manifestó que la UOM recibe dos tipos de ingreso, unos otorgados por la SEP y los otros "autogenerados mediante la edición de libros, su espacio cultural y los diversos cursos que imparte", y anunció que habrá acciones legales.