Funciona en Alemania el primer Banco de las Mujeres
Berlín. En materia de dinero, los hombres prefieren jugar, pero las mujeres privilegian la prudencia. De esta constatación partió Astrid Hastreiter para fundar el primer instituto financiero dedicado a las mujeres en Alemania: el Banco de las Mujeres. En el mundo ultramasculino de las finanzas, Astrid Hastreiter dirige "un instituto de mujeres para las mujeres. Pero atención -advierte ella-, si bien escuchamos a las mujeres, no estamos en contra de los hombres". Lo que constata en cambio esta muniquesa de 41 años es que "para ciertas mujeres, ir a su banquero es como ir al dentista". En Alemania es ''muy difícil para las mujeres obtener un préstamo", según Hastreiter. Condicionadas por el doble papel de trabajadoras (en puestos de bajos salarios) y madres, las jubilaciones de las mujeres son en promedio bajas, de ahí la importancia de realizar inversiones financieras que les permitan asegurar una renta conveniente en la vejez.