Detienen en Madrid a hombre clave para implicar a Milosevic en diversos crímenes
Comienza en la CIJ juicio contra Serbia y Montenegro por genocidio en Bosnia
Ampliar la imagen Familiares de víctimas de la guerra en Bosnia realizaron ayer una manifestación frente a la Corte Internacional de Justicia en La Haya Foto: Reuters
La Haya, 27 de febrero. La Corte Internacional de Justicia (CIJ) comenzó hoy las audiencias públicas de la querella de Bosnia-Herzegovina, en la que acusa a Serbia y Montenegro de genocidio durante la guerra de la ex Yugoslavia entre 1992 y 1995.
Las audiencias ante la CIJ, la mayor instancia judicial de la Organización de las Naciones Unidas, en La Haya, se prolongará hasta el 9 de mayo y se espera un fallo a finales de año.
La CIJ abrió el caso 13 años después de que Bosnia demandó a los otros ex miembros del Estado yugoslavo, del que se separó en 1992, tras una guerra que costó la vida a por lo menos 120 mil personas.
Sarajevo acusó a Belgrado de haber "matado, violado, torturado, secuestrado, detenido y exterminado a ciudadanos de Bosnia-Herzegovina".
Los abogados de Sarajevo deben probar la responsabilidad directa de Belgrado, acusado de haber financiado y apoyado a los serbios de Bosnia, lo que también intenta demostrar el fiscal del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPI) en el juicio contra el ex presidente yugoslavo, el serbio Slobodan Milosevic.
La Unión Europea, a su vez, amenazó a Serbia y Montenegro y a Bosnia-Herzegovina con interrumpir las negociaciones sobre la firma de un acuerdo de "estabilización y asociación" si Belgrado no coopera con el TPI, que juzga los crímenes de guerra cometidos en la antigua Yugoslavia, y otorgó para ello un plazo que vencerá a finales de marzo. Los cancilleres de los 25 países miembros instaron a Serbia y a Bosnia-Herzegovina a detener a presuntos criminales de guerra, entre ellos al serbobosnio Ratko Mladic y Radovan Karadzic, jefe político de los serbobosnios durante la guerra de Bosnia.
En tanto, la policía española anunció la detención en Madrid de Veselin Vukotic, presunto asesino del defensor de los derechos humanos en la ex Yugoslavia Enver Hadri y testigo de cargo contra Slobodan Milosevic.