Usted está aquí: domingo 26 de febrero de 2006 Cultura "Escribir historias es mi destino, y me gusta", afirma Cristina Pacheco

Aparece libro de la periodista y escritora con 33 relatos publicados en La Jornada

"Escribir historias es mi destino, y me gusta", afirma Cristina Pacheco

ANA MONICA RODRIGUEZ

Las historias de la vida cotidiana son para la escritora Cristina Pacheco "una huella digital" que identifica a cada ser humano.

A propósito de la publicación de su libro De amores y desamores, editado para la colección de Bolsillo de Random House Mondadori, subraya: "La historia cotidiana está llena de maravillas, de lo que nos pasa a todos, pero siempre hay algo más que le sucede a un individuo, es como una huella digital la manera en que cada quien interpreta su vida".

Habrá, continúa, quien ante el desamor diga que un clavo saca a otro clavo y habrá otros que lo vean como una pérdida irreparable o una trampa. Por ello, enfatiza en entrevista, "cada uno hace su lectura de la realidad y tras ella quiero ir de manera irresistible".

De amores y desamores es un volumen integrado por 33 cuentos, la mayoría publicados en otra edición en la década de los 80; ahora comparten espacio con nueve más que la periodista consideró necesario incluir en esta colección "con una nueva vestimenta". Todos los textos de la escritora aparecieron en la sección Mar de Historias, que cada domingo se publicó en este diario.

Los personajes a los que la autora retrata en el volumen "gozan y padecen la ciudad violenta y vertiginosa, pero también llena de espacios de ternura y solidaridad, que se manifiestan entre los aromas cotidianos y la música donde se queda el paso de los días".

El olor de la pasión, La niña de los seis nombres, Amantes de Amado Nervo, El regreso de Marlon Brando, La mujer de azul, Cebollas moradas, El loco amor, Dos sepulcros, Cae la noche y Madame Pompadour son algunos de los 33 cuentos escritos por la también cronista, entrevistadora y titular de programas de televisión y radio.

Explica sobre su oficio literario: "No hago historias de un tema; las historias salen siempre y existe una necesidad que propicia contarlas. En la historia de una persona mayor o una que viaja en tren hay algo que no sé por que razón me seduce; es algo que oigo, veo y que inevitablemente influye sobre mí".

-¿Qué es lo que seduce a Cristina Pacheco?

-Algo que le sucede a una persona en determinada condición. Cómo se despide una persona de alguien es un tema que me obsesiona mucho, porque uno no sabe cuándo volverás a verla; éste es un momento difícil, igual al de los rencuentros que se dan después de mucho tiempo.

"En todas las circunstancias somos noveles, aun cuando vivimos situaciones parecidas. Ello, debido a que uno cambia con el paso del tiempo; también cambia el mundo, las personas y el entorno; todas las historias son situaciones inéditas."

Cristina Pacheco asegura al hablar sobre la importancia que tiene en su vida la literatura: "Mi destino es escribir historias, ese destino me gusta; no me arrepiento de nada de lo que escribo; puede ser que no sea al mejor texto del mundo, pero sé que es el mejor que hice en un momento determinado".

La escritora, quien colabora desde hace años para La Jornada, ejemplifica una de las historias de esas, según define, que "se quedan en el fondo de la memoria y después salen de no sé de qué manera para contarlas".

Explica: "Un problema gravísimo es el desempleo. No soy especialista en economía ni me gustaría abordarlo desde ese punto de vista; pero sí me interesa la reacción de una persona que no tiene empleo, que camina por las calles de la ciudad y todas las puertas se le cierran y con ello se desarticula su vida, su familia, se mina su seguridad y es eso lo que me interesa: lo que sucede en su derredor y los cambios que determinan su vida".

 
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