Podría ser acusado de lavado y delincuencia organizada
Buscan abogados de Succar descongelar cuentas bancarias
A los recientes escándalos desatados por la difusión de llamadas entre el gobernador de Puebla, Mario Marín, y el empresario Kamel Nacif, en las que se demostró que el encarcelamiento de Lydia Cacho fue "urdido" como venganza contra la periodista por la publicación del libro Los demonios del Edén, sobre temas de pederastia, se suma la negativa del Poder Judicial Federal (PJF), por segunda ocasión, a otorgar una suspensión en vía de amparo al presunto pederasta Jean Touma Hanna Succar Kuri, El Johnny, amigo personal de Nacif.
De acuerdo con fuentes judiciales, los defensores de Succar en México buscaron obtener la protección de la justicia federal para que sean devueltas a El Johnny unas diez cuentas bancarias de la empresa Kanan Banana con al menos 20 millones de dólares.
Las cuentas abiertas en bancos mexicanos fueron aseguradas por la Procuraduría General de la República (PGR) a propósito de la investigación contra Succar, acusado de diversos delitos.
En esta ocasión, los representantes legales del empresario de origen libanés solicitaron la suspensión provisional en el juzgado primero de distrito con sede en Morelos, pero el órgano jurisdiccional negó el recurso y se declaró incompetente para conocer del fondo, por lo que en los próximos días será turnado a un juzgado con sede en el Distrito Federal.
El Ministerio Público Federal (MPF) congeló las cuentas desde junio de 2004, debido a que detectó operaciones sospechosas que no correspondían a los ingresos legales del inculpado.
Succar Kuri, a quien se atribuyen vínculos con Miguel Angel Yunes Linares, subsecretario de Seguridad Pública (SSP) federal, se encuentra detenido en Estados Unidos en espera de que se resuelva la extradición solicitada por México, ya que la justicia de Quintana Roo lo busca por su presunta responsabilidad en los delitos de violación equiparada y corrupción de menores.
Además de los cargos que le imputa la Procuraduría General de Justicia de Quintana Roo (PGJQR), la PGR podría solicitar a un juez federal la aprehensión del empresario por los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada.
Su esposa, Gloria Pita Rodríguez, La Ochi, originaria de Acapulco, Guerrero, quien al parecer se encargaba de guardar el material pornográfico que filmaba su cónyuge, también es investigada por el MPF.
No es la primera vez que los abogados de Succar buscan por la vía del amparo recuperar las cuentas con saldos millonarios. En 2004 el juzgado cuarto de distrito determinó negar la protección de la justicia federal a Succar Kuri.
La PGR abrió la averiguación previa SIEDO/UEIOFM/046/04, luego de que el 6 de abril de 2004 la Secretaría de Hacienda y Crédito Público envió al Ministerio Público Federal 22 expedientes con información relativa al análisis de reportes de 144 operaciones bancarias "inusuales" que realizó la empresa Kanan Banana y que pudieran estar relacionadas con actividades de lavado de dinero.
El juzgado cuarto también rechazó ortorgar la suspensión al empresario y le negó el amparo de fondo a Succar Kuri, tras considerar que el aseguramiento de las cuentas bancarias no viola ninguna garantía constitucional.
El quejoso alega que la PGR violó la Constitución y el Código Penal Federal porque ordenó el congelamiento sin que hubiera concluido la indagatoria y sin elementos "suficientes" para consignarlo ante un juez federal.
Sin embargo, desde el anterior juicio de amparo el PJF emitió el criterio de que ese argumento de la defensa es ineficaz, pues no es necesario acreditar el cuerpo del delito ni la probable responsabilidad para ordenar el aseguramiento de cuentas bancarias, ya que esto es una "medida precautoria para evitar que el inculpado borre o modifique posibles pruebas indiciarias".
Succar Kuri enfrenta varias denuncias penales, según las cuales desde 1996 abusaba sexualmente de menores, incluso de 8 años de edad.
Actualmente la PGR tiene acreditado que siete niños fueron sus víctimas al videograbarlos y fotografiarlos para después enviar ese material a otras personas mediante Internet. Los actos delictivos que se imputan al empresario se habrían cometido en Cancún. La Jornada reveló el pasado martes una presunta conjura que involucra al gobernador de Puebla, Mario Marín, y al empresario poblano José Kamel Nacif, quien habría ordenado aprehender a Lydia Cacho porque lo menciona en su libro Los demonios del Edén. Kamel Nacif es uno de los patrocinadores de la defensa de Succar Kuri en México.