La empresa les recortó el salario a la mitad con el pretexto de la competencia asiática

Durango: denuncian abusos en una maquiladora de pantalones

Los obreros, expuestos a enfermedades y deformaciones por el uso de químicos peligrosos

SAUL MALDONADO CORRESPONSAL

Durango Dgo., 7 de febrero. Trabajadores de la empresa Greater Durango, de capital estadunidense y dedicada a la maquila de pantalones de mezclilla, denunciaron que desde enero les disminuyeron los salarios hasta en 50 por ciento, además de que padecen explotación, despidos injustificados y graves enfermedades, como cáncer y deformación de los huesos de las manos.

Desde las cinco de la mañana de este martes los trabajadores comenzaron a llegar a la maquiladora para detener labores; sin embargo, mediante ''amenazas'', sus jefes lograron que ingresaran a laborar unos 200, mientras que otros tantos se quedaron fuera en demanda de respuesta de la gerencia y apoyo de las autoridades municipales y estatales.

Los trabajadores explicaron que la empresa, que se instaló en la entidad hace cinco años, emplea aproximadamente 500 personas. Dijeron que hasta enero había dos tipos de asalariados: unos ganaban mil 200 pesos a la semana y otros 600 pesos.

Pero con el pretexto de la competencia asiática, los patrones les redujeron los sueldos a 700 y a 300 pesos, respectivamente, y debido a la falta de empleo la gran mayoría tuvo que firmar contrato con las nuevas condiciones, entre ellas aumentar la producción 20 por ciento, es decir, trabajar cuatro horas extras diarias, a cambio de las cuales les dan otros 700 pesos a la quincena y una ''comida'' diaria consistente en una quesadilla.

Greater Durango se encarga de la parte final de la maquila, que consiste en lavar los pantalones de mezclilla para evitar que se encojan. Anualmente enjuagan entre 10 mil y 16 mil prendas de las marcas Polo y Ley. La empresa trabaja para Sun Apparel, la tercera entre las distribuidoras más grande de pantalones, dicen los obreros.

Los trabajadores denunciaron que los químicos que utilizan y el exceso de trabajo a que son sometidos les han provocado deformación de huesos en las manos, lesiones en hombros y espalda, además de enfermedades respiratorias por la pelusa. Algunos vomitan sangre.

Abel Raymundo García, obrero con cinco años de antigüedad, dijo que hay cuatro trabajadores enfermos de cáncer; uno ya está en coma y los otros con incapacidad por cinco años.

Los químicos, agregó, no actúan inmediatamente, sino que se quedan en los pulmones, y a largo plazo provocan enfermedades como el cáncer. El permanganato de potasio que emplean también se aloja en la sangre. ''Es una sustancia que come y deteriora el organismo; es como un ácido muy fuerte'', dijo.

Puntualizó que los instrumentos de seguridad no son aptos para trabajar, pues son desechables y no protegen bien la piel.

La empresa los obliga a doblar la producción con la intención de cansarlos y que renuncien, o de plano los despide para que no hagan antigüedad. ''Incluso si rompemos un hilo nos cobran tres pesos'', señaló.

Algunos trabajadores señalaron que, además de los despidos masivos sin liquidación de ley, les niegan una buena alimentación, pese a que está estipulado en su contrato.

Rogelio Troncoso, gerente general de Greater Durango, no quiso responder a las denuncias de los trabajadores.

Ricardo López Pescador, secretario de Gobierno estatal, dijo que las autoridades desconocen cualquier situación de explotación en las maquiladoras.

José Ramírez Gamero, secretario general de la Confederación de Trabajadores de México, señaló que la central ha intentado acercarse con los trabajadores para apoyarlos, pero desde la pasada administración estatal la Secretaría de Desarrollo Económico les prohibió cualquier contacto con ellos; no obstante, buscarán dialogar con los trabajadores para ayudarlos.