El timonel recordó que llevan ocho derrotas en los recientes 13 partidos

La mala racha del América viene del torneo anterior: Aguado

Dijo que se dramatiza con las Aguilas, porque si llevaran tres triunfos él sería un genio, que no lo es, y tampoco "el burro que parezco hoy"

Pardo condenó las agresiones contra Kléber

MIGUEL ANGEL RAMIREZ

La racha negativa del América no se limita a los tres encuentros del actual torneo Clausura 2006, sino que la arrastra de la campaña anterior, aseguró ayer el técnico Víctor Manuel Aguado.

Además dijo que no es "tan burro como parezco hoy" y que está tranquilo, porque su permanencia en el equipo no depende mucho de él, sino de Dios.

Lo primero que hizo ayer en la conferencia de prensa (en las instalaciones de Coapa) fue esquivar la pregunta en relación a si la permanencia del cuerpo técnico quedó muy comprometida tras el nuevo traspié ante Dorados.

"Estamos en un bache que se extiende también al torneo anterior. De los recientes 13 partidos América ha perdido ocho, y eso no va con el equipo", apuntó.

"Igual que tuvimos una buena etapa -continuó- de partidos sin perder; hoy vivimos la contra. Estamos buscando la manera de salir de ese bache mediante el trabajo, la disposición, que yo creo que ha mostrado el equipo."

Al preguntarle si el problema seguía siendo el exceso de confianza -como lo confesaron previo al partido Guillermo Ochoa y José Antonio Castro-, respondió:

"Bueno, es que muchas veces de la soberbia a la inseguridad parece que es muy lejos, pero es sólo un paso. En eso se está trabajando, en la conciencia, en saber que no podemos regalar nada."

Aguado también considera que ahora se dramatiza mucho por tratarse del América. Dijo que si fueran tres triunfos los que llevaran se hablaría de que es un superequipo y él un genio, pero "seguramente no soy ni tan genio como parecería, ni tan burro como parezco hoy".

Tampoco se siente presionado. Aceptó que el "entorno de América es pesado, que cuando las cosas no salen es difícil", pero tiene "una gran tranquilidad porque finalmente, la verdad, no pienso que esto dependa demasiado de mí.

"Creo que es de Dios. Entonces por alguna razón estoy aquí, me tocó ser técnico de América", indicó.

En relación con las manifestaciones racistas que hubo en el duelo contra Dorados, aseguró que no se percató de ellas.

Señaló que están acostumbrados "a que nos rayen la madre en todos lados", pero sería una "gravísima estupidez" que empezaran con el racismo en el futbol mexicano.

Pável Pardo tampoco se dio cuenta de alguna agresión a su compañero Kléber, pero igual lo condenó.

Sobre la mala racha, prefirió limitarla al torneo actual. "Hay que ocuparnos de hoy, porque si vamos a estar viendo el pasado, pues mejor nos sentamos, disfrutamos cuando ganamos el campeonato, cuando fuimos superlíderes y no llegamos a la final, y ponernos a llorar, pues tampoco".