El CIBA, al rescate del agave pulquero en el altiplano mexicano
tepetitla de lardizabal, tlax., 3 de febrero. Con la aplicación de tecnología de alto nivel, investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) promueven la recuperación del cultivo del agave pulquero en el altiplano de México, proyecto con el que se podrá alcanzar una producción de 30 mil litros diarios de pulque y aguamiel de "alta calidad, que cumplirá con estándares internacionales para su exportación", afirmó Sergio Trejo Estrada, director del Centro de Investigación en Biotecnología Aplicada (CIBA) del IPN.
Agregó que dentro de los programas prioritarios del CIBA, con sede en Tlaxcala, se incluye el desarrollo de producción primaria agrícola y la transformación de la agroindustria, por lo que la recuperación del agave pulquero "representa una alternativa de desarrollo económico y social de la región, pues cuenta con las condiciones ideales de suelo y clima para su cultivo".
Tras participar en la firma del convenio de donación del terreno conocido como Ex Hacienda San Juan Molinos, en el cual se construirán oficinas y aulas para duplicar la matrícula del CIBA y contar con un equipo de 80 alumnos de posgrado, señaló que con la industrialización del proceso de producción de pulque de alta calidad, "se podrá reactivar un sector agroindustrial prácticamente desaparecido en el altiplano mexicano".
Indicó que el proyecto, impulsado en colaboración con una empresa de capital privado, permitirá no sólo estandarizar la producción industrial de pulque, sino también de agua miel y otros derivados de alto valor comercial como bebidas fermentadas.
Trejo Estrada destacó que con la recuperación de este cultivo, que fue "arrasado" hace más de cuatro décadas de la mayor parte del altiplano, se beneficiará a un sector importante de los productores agrícolas y se recuperará una tradición en su elaboración, ya que es precisamente Tlaxcala "la región con mejores condiciones para su desarrollo".
Afirmó que la sustitución de agave pulquero por cebada y la depreciación comercial de la bebida, mermó la producción de la planta, por lo que uno de los proyectos más importantes es impulsar su cultivo masivo, pero "garantizando la alta calidad del producto, y no como ocurre con pequeñas producciones en las que la calidad varía y no se puede establecer un estándar para exportación".
El especialista aseguró que ante el desarrollo de programas agroindustriales que permitan recuperar este sector, "será necesario establecer una Norma Oficial Mexicana y un consejo regulador que impulse el desarrollo de la producción de pulque de alta calidad como una verdadera alternativa económica y laboral para cientos de campesinos"
Una vez que se instale la fase industrial del proyecto, que no depende del CIBA, agregó, se disparará la generación de materia prima, lo que permitirá reactivar una agroindustria que está "deprimida y prácticamente en extinción". Informó que el proyecto ya se encuentra en fase piloto con producciones que van de dos mil a cinco mil litros diarios.
Pesticidas biológicos
Por lo que respecta al desarrollo de proyectos de biotecnología alternativa, destacó la elaboración de pesticidas biológicos que podrán sustituir el uso de agroquímicos en todo el sur del altiplano mexicano, y en particular en el sur del estado de Tlaxcala, donde la contaminación por estos factores "es muy importante, tanto en su afectación para el medio ambiente como para la salud humana".
Agregó que el desarrollo de estos pesticidas biológicos ha beneficiado a 70 por ciento de los productores de la región de Petitla-Ixtlahuzitla, "uno de los distritos de riego más productivos del altiplano central", por lo que consideró prioritario seguir impulsando estos proyectos en beneficio "no sólo económico, sino social y por la calidad de vida de los campesinos".
Laura Poy Solano, enviada